Podemos, el musical

La formación morada hizo una demostración de fuerza con una llamativa puesta en escena.

Pablo Iglesias tiene algo de estrella de rock. Y a Podemos, el partido que dirige, no le falta habilidad para organizar una más que correcta puesta en escena. Dos factores que se demostraron este jueves en Zaragoza en el acto central de la formación en Aragón.


El mitin arrancaba teóricamente a las 19.00 y a las 18.15 ya resultaba complicado moverse por la Sala Multiusos del Auditorio. Cuando a las 18.50 saltaron los líderes del partido al escenario ya no cabía un alma y el machacado grito de '¡sí, se puede!' atronaba en el recinto.


Antes de todo hubo poesía y música. Los zaragozanos Dadá abrieron, con aires gamberros, un ronda musical que cerró Santiago Auserón. Juan Perro apenas interpretó un par de temas ('Río negro' y 'Semilla negra'), que chocaron cromáticamente con las camisetas moradas de los presentes. Pocos minutos, pero de calidad.


La música jugó un papel relevante a lo largo de todo el mitin. Sonó 'Dust in the wind' de Kansas, y el 'People have the power' de Patti Smith, un habitual en el repertorio que los 'podemitas' reproducen en todas sus citas.


Los organizadores también supieron tocar la fibra sensible de los seguidores del partido al cerrar el mitin al ritmo del 'Canto a la libertad' de Labordeta. Fue el cierre de un espectáculo del que no pudo participar un amplio grupo que se quedó a las puertas y tuvo que seguirlo por la megafonía exterior.


Pero el clímax de la tarde noche coincidió con la salida al escenario de Iglesias. El de la coleta se gusta. Ya es un experto del atril y encendió a los asistentes desde el minuto uno con el ejército de "zombis" de Madrid y Valencia que se trajo a la capital aragonesa.


El público, integrado por gente joven y por no pocos sexagenarios, también tuvo su puntito musical. Entonó el 'A por ellos' justo antes de que Íñigo Errejón iniciara su discurso y repitió el 'Sí, se puede' hasta la saciedad.