La convocatoria de los alcaldes de Berbegal (CHA) y Peralta de Alcofea (PP) de una manifestación el 7 de noviembre en Zaragoza para reclamar la devolución de los bienes de todas las parroquias aragonesas retenidos en Lérida ha recibido el respaldo casi unánime de los partidos políticos. Aunque el PSOE ya se pronunció a favor el martes nada más conocer la convocatoria, el presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, expresó ayer su apoyo pero no aclaró si acudiría. Los grupos políticos PP, PAR y CHA también se suman a la iniciativa, que coincidirá con la visita del Papa Benedicto XVI a Barcelona.

El presidente Iglesias aprovechó para arremeter contra el obispo de Lérida, Joan Piris, al que acusó de incumplir el Concordato, que estipula las relaciones entre España y el Vaticano desde 1979, por negarse a la devolución de los bienes. “Cuando un obispo no cumple los decretos, pone en situación de precariedad, de dificultad, el propio Concordato”, comentó ayer. “El obispo de Lérida tendrá que hacer una gran reflexión” con respecto a este asunto. “Si los obispos no cumplen el Concordato, es difícil explicar a la sociedad por qué existe”, apostilló.

Por su parte, el vicario judicial y portavoz del Obispado de Lérida, Antoni Agelet, aseguró que Joan Piris “no incumple nada”. En respuesta al presidente Iglesias, comentó que el Concordato (1953) fue sustituido por los acuerdos entre la Santa Sede y el Estado Español (1979). Pero aunque el presidente aragonés hiciera alusión a estos últimos, le recordó que el Obispado de Barbastro-Monzón y la DGA ya solicitaron a un juzgado de Barbastro que escuchara las resoluciones de la Iglesia. “El juez ya dictó resolución diciendo que no procedía porque aquellos decretos de la Santa Sede no entraban en los supuestos que contemplaba el acuerdo sobre asuntos jurídicos entre la Santa Sede y el Estado Español”, apuntó.

Pero al margen de este cruce de acusaciones, los alcaldes de Berbegal, Miguel Ángel Puyuelo (CHA), y Peralta de Alcofea, Obdulia Gracia (PP), ya cuentan con numerosos apoyos mientras empiezan a organizar la manifestación, que todavía no tiene lema, pero en la que no solo reclamarán sus piezas sino las otras 112 en litigio. Gracia insistió ayer en la necesidad de que exista esa “unidad de acción” de todas las instituciones y partidos políticos aragoneses. Por ello, valoró de forma positiva las declaraciones de apoyo de todos los grupos.

Participación de Iglesias

Iglesias todavía no ya dicho si acudirá a la manifestación. “El presidente de la Comunidad no debe estar mucho de manifestaciones”, indicó él mismo. Por ello, “vamos a ver quién acude”, aunque “ya hemos dicho que apoyamos la vuelta de los bienes”, aclaró. En este sentido, el portavoz del PSOE en las Cortes, Jesús Miguel Franco, opinó que quizá no tiene que acudir el presidente, pero que los socialistas tendrán representación.

También el Partido Popular apoya esta iniciativa de uno de sus alcaldes. Además, estima que es un “problema de identidad y de autoestima de Aragón” que tiene que unir a todas las fuerzas políticas. No obstante, “no nos deja de sorprender el apoyo que tiene por parte del PSOE cuando durante 11 años ha permanecido bastante inactivo con esta cuestión”, aseguró ayer el portavoz en las Cortes, Eloy Suárez. En este sentido, recuerda que el Gobierno de Aragón no recurrió la catalogación de las piezas que hizo la Generalitat, y que ahora es parte del problema.

El PAR también estará en la manifestación para exigir el retorno. “Desde el principio, el partido ha pedido de una manera rotunda la devolución”, apuntó ayer el responsable del comité intercomarcal de Huesca, Roque Vicente.

“Apoyamos absolutamente cualquier iniciativa. Pero también exigimos al Gobierno de Aragón que se implique, como lo hizo con las piezas de Barbastro tras años de insistencia. No acabamos de entender por qué en este caso no lo hace”, comentó el vicesecretario general de Chunta Aragonesista, José Luis Soro. También resaltan que “la unidad de acción es importante” por lo que esperan un gran respaldo y que no se olvide que “no solo es un conflicto eclesiástico sino también civil”.

El portavoz de IU, Adolfo Barrena, señaló que en octubre ya habrá tiempo para pronunciarse sobre este asunto porque su partido centra las fuerzas en la huelga general del día 29 de septiembre.