El conservatorio superior de música de Aragón se ha convertido en el centro más demandado de España. La reconocida plantilla de profesores, la incorporación de grandes maestros y el desarrollo de un innovador programa docente han conseguido que este centro tenga este año el triple de solicitudes que los del resto del país. Esto supondrá que un alto porcentaje de los alumnos que aspiran a entrar en él y convertirse en músicos profesionales se queden sin plaza para el próximo curso. De hecho, las peticiones recibidas en las últimas semanas cuadruplican los puestos ofertados. Y esta situación se agrava en especialidades como piano, donde las solicitudes quintuplican las plazas disponibles. Registra también una alta demanda incluso en materias en las que tradicionalmente ha habido déficit, por ejemplo, fagot, contrabajo y viola.

"Tenemos preinscripciones de jóvenes de toda España y esto hace que acaben entrando en el centro los más capacitados del país. La semana pasada comenzamos las pruebas de acceso y estamos comprobando el gran nivel de los que se presentan", explica Pedro Purrey, director del conservatorio superior de música de Aragón. La razón: que es "un proyecto completamente distinto al que existe en España y muy novedoso. Esto atrae a la gente", añade.

Este programa, que ha empezado a dar sus frutos, comenzó hace cinco años y se basa en dos pilares: contar con los mejores profesores y dar más relevancia a la interpretación en grupo frente a las clases tradicionales. El objetivo: que el conservatorio sea atractivo para docentes y alumnos y que se convierta en un centro de referencia de enseñanza musical en Europa.

Para crear una plantilla de calidad, se cuenta con profesores que trabajan a tiempo completo, otros que van unas horas y también docentes venidos de todo el mundo que imparten cursos de postgrado. Estos, además, dan clase a los estudiantes de grado y son solistas reconocidos internacionalmente que o bien pertenecen a orquestas de gran prestigio o son invitados habitualmente a trabajar con ellas.

Pero estos grandes maestros no se quedan solo dentro del conservatorio. "Los presentamos al público aragonés actuando como solistas en conciertos ofrecidos por las grandes formaciones orquestales del conservatorio, la orquesta sinfónica, la de cámara y la banda sinfónica, en los ciclos que programa el Auditorio de Zaragoza", explica Purrey. Hasta la fecha, han actuado siete de ellos: José María Colom (pianista), Lucas Macías (oboe), Nicolás Chumachenco (violinista), Franco Petrachi (contrabajista), Eric Terwilliger (trompa solista), Peter Lukas Graf (flautista) y Stefano Canuti (fagotista). "Estas personas han incrementado todavía más el nivel de calidad de nuestra plantilla", comenta el director del conservatorio.

Clases innovadoras

En cuanto al otro atractivo del centro -el programa docente- se trabaja para dar a los estudiantes una enseñanza diferente a la que recibirían en otro conservatorio español. "Tenemos varias peculiaridades. Por ejemplo, aquí un profesor no viene a dar su clase de violín y se va, sino que forma parte de un proyecto", dice Purrey. Este explica que mientras que en otros conservatorios la orquesta es una materia más, en el de Aragón es "la asignatura en mayúsculas". "Los alumnos trabajan para estar en la orquesta y tienen la posibilidad de participar en el ámbito cultural. Por ejemplo, tocan en la sala Mozart ante 2.000 personas en un ciclo con las grandes agrupaciones", argumenta el director del conservatorio. Este añade, además, que en el caso de los que cursan composición, también tienen la oportunidad de ver cómo se interpretan sus obras.