La Guardia Civil ha desarticulado una banda especializada en los robos en naves industriales del norte de España. La operación, que sigue abierta, ha supuesto ya la detención de 18 personas, principalmente de nacionalidad rumana, además de una de procedencia china y otra peruana.

Según ha informado el delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, se trata de una operación "muy importante" pues se ha dado con una organización "perfectamente organizada" que es artífice por lo menos de unos 30 robos, una cifra que puede ser mayor cuando se estudien otros posibles casos.

La búsqueda de los autores se inició tras denunciarse varios robos en el polígono de Peñaranda de Bracamonte, donde se sustrajeron cientos de jamones ibéricos por un valor aproximado de unos 90.000 euros.

Tras consolidarse las investigaciones, se les atribuyen diferentes actuaciones en el norte de España, en zonas como Guipúzcoa, Navarra, Teruel, Huesca, Cáceres y Asturias, entre otras. Después, los autores desplazaban las mercancías hasta naves en Madrid y Guadalajara.

El 'modus operandi' de la banda era que un primer grupo se acercaba a la zona y estudiaba las posibles víctimas, la mercancía que tenían y la forma de superar las barreras de seguridad. Después, otros se encargaban de inhibir la zona, vigilar, hacerse con el material y llevarlo a diferentes localidades de Madrid y Guadalajara.

Material y salida al mercado

A pesar de que puede haber nuevas detenciones y registros, la Benemérita ya se ha hecho con cuatro furgonetas cargadas de material. En ellas había herramientas de todo tipo, material de construcción, maquinaria para el jardín, televisores y bebidas alcohólicas, entre otros utensilios.

También, la Guardia Civil ha requisado uno furgoneta de transporte que habían robado en una de sus actuaciones, tres coches propios de alta gama y unos 9.000 euros en metálico.

Los materiales trataban luego de venderlos en el mercado negro. Por ejemplo, según fuentes de la investigación, se cree que parte de las bebidas alcohólicas que recogían en los robos eran posteriormente adquiridas por empresarios de origen chino para el consumo en sus establecimientos.

Los detenidos tienen todos entre 45 y 28 años. Los de origen rumano tienen entre sí relaciones familiares y de parentesco. De ellos, dos son hermanos y eran los encargados de "dirigir" la banda. La investigación está bajo secreto de sumario y está dirigida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número uno de Peñaranda de Bracamonte (Salamanca).