AURORA EGIDO MOLINA

Aurora Egido: "La literatura enseña a superar las miserias cotidianas"

Especialista en las letras del Siglo de Oro

Aurora Egido ante la puerta de la Facultad de Filosofía de Zaragoza
Aurora Egido: "La literatura enseña a superar las miserias cotidianas"
pedro etura

Aurora Egido (Molina de Aragón, Guadalajara, 1946) es catedrática de Literatura Española de la Universidad de Zaragoza. Realizó su tesis doctoral sobre "La poesía aragonesa del siglo XVII y el culteranismo". Es especialista en Literatura del Siglo de Oro.

 

Una satisfacción, ¿no?

Por supuesto. Como dicen ahora los jóvenes, para mi esto es 'lo más'. Después de dedicarme tantos años a investigar sobre nuestra literatura, un premio tan importante como este supone ver mis esfuerzos compensados. No se puede pedir más.

 

Sobre todo dedicándose a la literatura, que no es una disciplina de moda.

La enseñanza de la Literatura ha disminuido en nuestro sistema educativo, y la preparación que tienen los estudiantes es peor que en otras épocas.

 

Eso es porque hay quien piensa que la literatura no sirve para nada.

Vivimos en un mundo que valora mucho la tecnología y lo inmediato. Pero yo soy de las que cree que hay que enseñar valores que no sean tan efímeros. La literatura ayuda a superar las miserias cotidianas. Y, en el aprendizaje, un buen conocimiento de la lengua es el mejor camino para acceder a todos los saberes.

 

Usted fue comisaria del programa cultural que celebró los 400 años del nacimiento de Gracián. ¿Sigue vigente la obra del aragonés?

Por supuesto. Es más, en el siglo XXI va a estar de moda en determinados círculos porque Gracián enseña lo difícil que es llegar a ser persona, y nos obliga a descifrar lo que está oculto tras las apariencias. Nos enseña una moral para la vida y para la acción.

 

Es su escritor preferido.

Pues no. Me gusta trabajar en él porque obliga a pensar, pero yo disfruto con autores menos complejos. Mi autor favorito es San Juan de la Cruz.

 

Y, ¿quién lee hoy a San Juan de la Cruz?

Pues tiene sus adeptos, no se crea. Es uno de esos autores breves de los que no es muy complicado presumir de haberlos leído.