Puesta a punto de enero: sobre ruedas, en sala o bajo el agua

Ponerse en forma, perder esos kilos de más o simplemente iniciar unos hábitos de vida saludables.

Puesta a punto de enero: sobre ruedas, en sala o bajo el agua
Puesta a punto de enero: sobre ruedas, en sala o bajo el agua

Recién llegado el 2018, son muchos los aragoneses que deciden ponerse en forma, perder esos kilos de más o simplemente iniciar unos hábitos de vida saludables. Los gimnasios zaragozanos se preparan para una de las épocas de mayor actividad en sus salas, al menos, en cuanto a inscripciones se refiere.

Incluso hay algunos gimnasios, como Dreamfit Zaragoza, que se preparan para adaptar sus horarios y reforzar su personal durante los meses de enero y febrero, cuando calculan que se da un aumento del 10% del número de abonados con respecto al mes de diciembre. “También hemos decidido incorporar la figuran del entrenador personal que pueda guiar a los usuarios y ayudarles a conseguir estos objetivos de una manera más individualizada”, explica Iñigo Cebollada, director de Calidad de la cadena y del centro zaragozano.

En cuanto a las demandas de los usuarios zaragozanos durante estas fechas, aseguran que la primera es la pérdida de peso: “quemar los turrones y recuperar el peso de antes de las Navidades”. “También se busca el iniciarse en unos hábitos saludables en los que se incluye hacer deporte dos o tres días a la semana o simplemente volver a la rutina de entrenamientos que se abandonó por las vacaciones”, añade Cebollada. En su opinión, la clave del éxito dentro de la sala es ser paciente y marcarse unos objetivos realistas.

Sin embargo, según las estadísticas del centro, estos buenos propósitos no duran mucho tiempo ya que en torno al 50% de las nuevas altas abandona el gimnasio durante los seis primeros meses del año. En cuanto al target de sus usuarios, “el 90% de nuestros socios son menores de 55 años, el 40% tienen entre 35 y 44 años y prácticamente la mitad son mujeres”, explica el director.

Algo parecido ocurre en las instalaciones de Vivagym, cadena que cuenta con dos gimnasios en Zaragoza –puerta del Carmen y Actur- y que en Semana Santa abrirá un nuevo centro en camino de las Torres; donde también se preparan para una de las campañas más fuertes del año. “En nuestro caso durante el mes de enero aumentan las inscripciones hasta en un 50% con respecto al resto del año”, asegura Héctor Notivol, coordinador del centro.

“En general, la gente que supera las primeras semanas viniendo al gimnasio, suele quedarse. Lo importante es crear un hábito y aprender a disfrutar del deporte, ahí es dónde entramos nosotros”, añade.

En cuanto a las demandas de los zaragozanos en este tipo de instalaciones, sin duda la última moda reside en las actividades dirigidas con clases como ciclyng, bodypump, bodyattack y clases de baile que complementan a otro tipo de zonas como las salas de cardio, tonificación y fitness.

Otro de los mayores reclamos para quienes buscan iniciarse en esto de la vida sana con el inicio del nuevo año se encuentra bajo el agua. Las piscinas cubiertas zaragozanas se preparan para recibir a nuevos nadadores durante el mes de enero. “Hemos detectado un interés creciente de las actividades físicas en la piscina, semejante al que existe por otro tipo de ejercicios como ir a correr o al gimnasio”, explica Miguel Gil, gerente de Aquactiva.

“No solo hemos detectado un aumento del número de inscripciones en las actividades de fitness acuático (aquagym e hidrospinnig) sino que también en cursos de natación para principiantes”, añade. Y es que, en su opinión, la práctica deportiva en el agua aporta un gran trabajo cardiovascular (aeróbico fundamentalmente), “unido al beneficio de hacer un deporte en un medio que no es agresivo ni lesivo para las articulaciones, ya que no hay impacto de las mismas  y el peso de una persona sumergida en el agua se reduce en un 70%”, asevera Gil.

Además, y en contra de lo que ocurre con el “ejercicio terrestre”, el zaragozano asegura que su práctica se prolonga durante todo el año gracias al periodo de piscinas al aire libre. Por si fuera poco, el medio acuático ofrece una peculiaridad que no se encuentra en otros ámbitos y uno de sus mayores beneficios ya que “se trata de uno de los pocos ámbitos en los que no funcionan los teléfonos móviles, al menos por ahora”, bromea Gil.

El Síndrome de culpabilidad pos-navideño

Desde el punto de vista nutricional, durante esta época del año estamos expuestos a una serie de dietas milagrosas que nada tienen que ver con las premisas básicas de un estilo de vida saludable. “Tras un mes de diciembre marcado por los excesos, el pesar general hace que sintamos la necesidad de compensar ese sentimiento de malestar y consecuente subida de kilos en la báscula. Se trata además, de un fenómeno global”, explica César Castellanos, nutricionista y fisioterapeuta zaragozano.

Sumado a la denominada ‘Operación bikini’ y al fin del verano, este fenómeno, denominado Síndrome de culpabilidad pos-navideño, se corresponde con “uno de los tres momentos del año en los que se pretende un cambio lleno de buenas intenciones de forma masiva”. A esto se suman la aparición de campañas publicitarias engañosas y productos destinados al adelgazamiento y la pérdida de peso de forma prácticamente milagrosa. “Precisamente es en estos momentos cuando muchas personas se decantan por promesas de pérdida de peso rápido y optan por creer en las dietas milagro”, añade el experto.

“Otro de los errores más comunes es tratar de compensar estos excesos con ayunos, saltarse comidas o hacer comidas ‘frugales’, así como caer en atajos y dietas depurativas”, explica Castellanos. “En salud no  hay atajos, lo importante es ser constantes y no esperar resultados mágicos en cortos espacios de tiempo para evitar el denominado efecto rebote”, añade.

En su opinón, la clave está en comer bien todo el año, con una alimentación basada en frutas, verduras, hortalizas, legumbres, cereales integrales, carnes, pescados, huevos y frutos secos, y, si es posible, “que sean frescos y sin etiqueta, y en la medida de lo posible, de temporada y proximidad. Por supuesto, todo esto acompañado de la práctica de ejercicio físico regular y un descanso adecuado”, concluye.

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