Solo Podemos apoya el techo de gasto para 2018 del Ejecutivo PSOE-CHA

El Ejecutivo PSOE-CHA aprobó ayer en las Cortes de Aragón el techo de gasto de 2018 –que asciende a un total de 5.303 millones de euros–, con el único apoyo de Podemos. IU, con quien el presidente de Aragón, Javier Lambán, pretende llegar a un acuerdo para alcanzar "un presupuesto de izquierdas", votó en contra, al igual que el PP. El PAR y Ciudadanos optaron por la abstención. El acuerdo salió adelante con 34 votos a favor, 21 en contra y 10 abstenciones.

A Podemos, como reconoció la propia Maru Díaz, le tocó "comerse un sapo". La formación morada, que se ha mostrado abiertamente "en contra" del techo de techo de gasto, votó a favor únicamente para que la tramitación presupuestaria pudiera seguir adelante, una postura muy distinta a la mantenida en marzo, momento en que dieron plantón al Gobierno y se negaron a votarlo solo dos días después de haber pactado los presupuestos.

Lambán no contó con el apoyo de Izquierda Unida, que votó en contra como ya hiciera en el presupuesto de 2017. La diputada Patricia Luquin criticó al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, por hacer "una utilización política" de esta herramienta y abogó por "acabar con ella", ya que, en su opinión, "es una de las medidas liberales más duras que se han implantado". El presidente sí obtuvo el respaldo de su socio de Gobierno (CHA), aunque el diputado Gregorio Briz reconoció que el techo de gasto le producía "urticaria". "Es algo que no nos gusta aprobar, pero tenemos que utilizarlo para hacer políticas de izquierda", aseveró.

Si algo marcó el debate fue el constante choque entre izquierda y derecha. Al PP se le criticó que no apoyara el techo de gasto, ya que, de no haberse ratificado, "Aragón habría perdido 250 millones de euros". La podemista Maru Díaz llegó a asegurar que la postura de los populares era "de juzgado de guardia", todo "un ejercicio de incoherencia".

El diputado Antonio Suárez, no obstante, recalcó que el PP no podía dar su ‘sí’ a un techo de gasto que incluía una política fiscal "excesiva y confiscatoria" que "perjudica a las clases medias". "Ahí está Sucesiones, Donaciones, Patrimonio e Hidrocarburos. El PP no va a apoyar ningún movimiento del Gobierno que no contemple una bajada de impuestos para todos los aragoneses", manifestó.

Los dardos de la derecha tampoco faltaron. Cuando la diputada de Podemos aseguró que se tragaban el sapo "por los aragoneses y por los 250 millones de más que llegarán a la Comunidad", la bancada popular contestó con un contundente "y por Santisteve", en relación a las negociaciones del presupuesto del Ayuntamiento de Zaragoza.

Más comedidos, aunque también críticos, se mostraron el PAR y Ciudadanos. Ambos optaron por la abstención para "no poner más palos en las ruedas del Gobierno", pero dieron una de cal y otra de arena. Los primeros criticaron la política impositiva del Ejecutivo PSOE-CHA y cargaron contra Lambán por las "continuas faltas de respeto" hacia su formación. "Es el presidente más faltón y ofensivo que ha tenido esta Comunidad. Si nos abstenemos es por los aragoneses, no por usted", advirtió la diputada Elena Allué.

Javier Martínez, de Ciudadanos, también afeó la política fiscal de la DGA. "La bonanza que se está encontrando no repercute en las familias, a las que se les sigue pidiendo un esfuerzo", dijo. Se refirió, asimismo, a la actitud de la formación morada. "Deseo al Gobierno un gran final de legislatura. Lo último que me esperaba era que Podemos hincara la rodilla. Con esto ustedes ya lo tienen absolutamente todo", aseguró.

"Camino por recuperar"

La aprobación del techo de gasto permitirá a Aragón gastar un máximo de 5.303 millones en 2018. No obstante, el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, reconoció que "queda camino por delante". Este límite, explicó, "ha crecido 608,8 millones de euros entre 2016 y 2018". "De 2009 a 2015 se produjo una disminución de 1.064 que afectó de una forma directa a los servicios públicos. Todavía quedan, por tanto 400 millones por recuperar", afirmó.