La Guardia Civil ha detenido en la madrugada del viernes al presunto autor de los disparos que este jueves por la tarde acabaron con la vida de tres personas en Andorra. La detención se ha producido sobre las 2.50 entre las localidades de Cantavieja y Mirambel y al sospechoso se le han incautado tres armas, dos de ellas sustraídas a los dos guardias civiles muertos. 

Hasta el momento solo ha podido confirmarse que se trata de un ciudadano de nacionalidad extranjera que actuaba solo y que está siendo trasladado a dependencias de la Guardia Civil en la capital turolense. La identidad está por confirmar, si bien los indicios apuntan a que se trata de un exmilitar de un país del este. El arrestado no está colaborando ante las preguntas de los agentes. 

La detención fue realizada por una patrulla de la Guardia Civil perteneciente a Castellón y tuvo lugar en el punto kilométrico 95,500 de la A-226, en el término municipal de Cantavieja (Teruel). Los agentes dieron captura al sospechoso, que iba a pie después de que sufriera un accidente de tráfico con la 'pickup' verde con la que se dio a la fuga.

Conmoción en el Bajo Aragón Histórico

Tras el terrible tiroteo ocurrido alrededor de las 19.00 del jueves, se desplegó un gran operativo de agentes de la Benemérita en las provincias de Teruel y Zaragoza. Además, se alertó a las comunidades vecinas de Valencia y Cataluña. Se activaron controles en las carreteras de la zona para seguir todas las vías y se peinaron las calles de varias localidades. También se difundió un retrato robot.

El pistolero asesinó sobre las 19.00 con un arma de fuego a dos guardias civiles del cuartel de Alcañiz, Víctor Romero Pérez y Víctor Jesús Caballero Espinosa; y a un vecino de Andorra, José Luis Iranzo, nieto del popular jotero el Pastor de Andorra.

Los dos agentes pertenecían al equipo Roca, un cuerpo de la Benemérita especializado en robos rurales que se creó en 2012 en el Bajo Aragón. Romero, de 30 años, natural de Calanda y residente en Alcañiz, estaba casado y tenía una hija de pocos meses. Caballero, de 38 años, era de Cádiz aunque estaba establecido en el Bajo Aragón, de donde era su pareja sentimental. Por su parte, Iranzo, ganadero de profesión, era muy conocido y querido en el sector al ser miembro de la ejecutiva de UAGA y presidente de la cooperativa de Andorra. Por su profesión era un gran conocedor de los montes y los caminos de la zona. Precisamente fue Iranzo quien avisó a los agentes de que había oído disparos, lo que motivó que el dispositivo se desplegara de nuevo, según ha explicado este viernes el delegado del Gobierno, Gustavo Alcalde, en declaraciones a la Cadena SER.

Los hechos se produjeron en el Mas del Saso de la villa minera, donde Iranzo tiene su paridera. Fuentes oficiales no confirmaron si los dos agentes de la Guardia Civil se encontraban en el operativo de búsqueda del exmilitar o si estaban haciendo labores propias del equipo Roca. Otras fuentes precisaron que el exmilitar sabía bien dónde disparaba porque hirió de muerte a los dos agentes pese a sus chalecos antibalas.

Tras el suceso, el asesino se dio a la fuga en un Mitsubishi ‘pick up’ con matrícula 2779 CKT propiedad de Iranzo. Iba vestido con uniforme militar y fuertemente armado, con al menos dos pistolas Beretta robadas a los dos guardias civiles que mató.

Un amplio despliegue de la Guardia Civil acordonó la zona en la que se produjo el tiroteo y de madrugada seguía buscando al fugitivo, que finalmente fue detenido alrededor de las 3.00 del viernes. El operativo en las provincias de Teruel y Zaragoza también activó la alerta en provincias vecinas como Castellón. En Cataluña, los Mossos d’Esquadra también recibieron información para estar vigilantes.

Gran conmoción en la zona

La noticia corrió rápidamente por las redes sociales. Incluso difundió el bulo de que el asesino se había atrincherado en un pub de Andorra con rehenes o que había sido abatido. Sin embargo, ambas circunstancias eran falsas y se relacionaban con la recomendación de la Benemérita, seguida por los clientes del pub, de que los vecinos de Andorra no salieran de sus domicilios.

El delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, se personó en Andorra para condenar los asesinatos y pedir tranquilidad. Desmintió algunos de los bulos que circulaban por Whatsapp, como que el asesino hubiera sido abatido o que hubiera más personas muertas. "Lo importante en estos momentos es que no nos dejemos llevar por las noticias falsas a través de las redes sociales, que solo generan intranquilidad", incidió Alcalde. El delegado estuvo acompañado por el subdelegado del Gobierno en Teruel, José María Valero. Además, envió un mensaje de calma y de confianza en los operativos de búsqueda. "El asesino va a caer, pero hay que tener paciencia. Son una de las mejores policías del mundo, nos han demostrado en innumerables ocasiones de qué son capaces, y lo volverán a hacer de nuevo", afirmó anoche.

La alcaldesa de Andorra, Sofía Ciércoles, se quedó conmocionada tras conocer una noticia "terrible" que le dejó completamente "helada". Ciércoles solo tuvo buenas palabras para recordar a Iranzo, una persona "entrañable y muy querida por todos los andorranos". Para la primer edil "ayer fue, sin duda, el día más triste de la historia de Andorra".

Cabe recordar que el asesino hirió hace diez días a dos hombres, que ya se encuentran fuera de peligro, cuando intentaban entrar en su masico de Albalate, en cuyo interior se encontraba el pistolero. El propietario del masico, Manuel A. (72 años), acudió a la casa de campo acompañado de un cerrajero, Manuel M. (42 años), para cambiar la cerradura, que llevaba unos días bloqueada. Fueron sorprendidos por un hombre de complexión alta que les disparó a bocajarro. Hirió primero al más joven en el brazo y, después, al propietario en el costado.

Pésame de Rajoy

Las condolencias y las muestras de cariño a los familiares y amigos de los dos agentes de la Guardia Civil fueron este jueves muy numerosas. El presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, dijo en Twitter: "Nos llena de dolor las muertes producidas cerca de Albalate del Arzobispo. Mi sentido pésame a sus familias y compañeros, y mi reconocimiento a la labor de la Guardia Civil". El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, también utilizó la misma red social. En un primer tuit dijo: "Descansen en paz Víctor Romero y Víctor Jesús Caballero, agentes de la Guardia Civil fallecidos en acto de servicio en Teruel. Perdieron su vida para protegernos a todos. Todo mi cariño y apoyo para sus familias y compañeros".

Después emitió un segundo comentario para dar su "más sentido pésame para la familia y amigos de José Iranzo".

En Aragón también se sucedieron las reacciones. El presidente de DGA, Javier Lambán, dijo sentirse "conmocionado por los trágicos sucesos ocurridos entre Albalate y Andorra" y expresó "sus condolencias y las de DGA; y el apoyo a las familias y compañeros de las personas fallecidas" al tiempo que reconoció el trabajo de la Guardia Civil y las Fuerzas de Seguridad.