Los 14 senadores aragoneses votarán a favor de aplicar el artículo 155 de la Constitución
Son ocho del PP, cuatro del PSOE y dos del PAR. Podemos, Cs IU y CHA no tienen representación. La Mesa de la Cámara Alta excluyó ayer la posibilidad de dar voz a los presidentes autonómicos
Esta vez no va a haber ninguna discrepancia en la representación aragonesa. Los 14 senadores con los que cuenta Aragón van a votar a favor de que el Estado asuma la gestión de la Generalitat de Cataluña. El apoyo rotundo de la representación aragonesa a la aplicación del artículo 155 de la Carta Magna va a ser casi una excepción dentro del Senado. Habrá división de opiniones al menos entre los representantes de Andalucía, la Comunidad Valenciana, Galicia, País Vasco, Navarra, Baleares, Madrid, Canarias y obviamente Cataluña.
La unanimidad de los representantes aragoneses en el voto a favor del artículo 155 de la Constitución a la Generalitat catalana se debe a que PP, PSOE y PAR son los tres únicos partidos que lograron representación por Zaragoza, Huesca y Teruel en la Cámara Alta en las elecciones generales de 2016, repartiéndose los 12 senadores que se eligen por este proceso. Y los líderes de estas tres formaciones han dejado claro su apoyo a la decisión que asumió ayer el Consejo de Ministros. Podemos-Aragón, IU-Aragón y CHA se oponen, mientras que Cs-Aragón está a favor, pero ninguno tiene senadores aragoneses.
Junto a los 12 senadores electos por Aragón, la Comunidad cuenta con otros dos representantes, que actúan en representación directa de las Cortes autonómicas. la Cámara eligió para esta función a los expresidentes Luisa Fernanda Rudi (PP) yMarcelino Iglesias (PSOE) y ambos apoyarán también la decisión del Consejo de Ministros.
La unidad de los senadores aragoneses solo podrá quebrarse si el pleno de las Cortes pide expresamente a sus dos representantes Rudi e Iglesias que voten en otro sentido y estos deciden hacerle caso. Sin embargo, ninguno de los dos estaría obligado a hacerlo. Además, en las Cortes de Aragón hay una amplia mayoría constitucionalista, así que hay muy pocas posibilidades de que llegue a producir ese mandato.
En el Congreso cambia
La Constitución delimita la aplicación de su artículo 155 exclusivamente al Senado y deja sin funciones al Congreso, donde Aragón tiene 13 diputados. De esta manera, al menos en el inicio del procedimiento de intervención, ninguno de ellos tendrá una participación formal.
Sin embargo, sí van a tener un papel posterior, a través de iniciativas de control al Gobierno central. Cuando llegue ese momento es previsible que suceda a partir de noviembre comenzarán las discrepancias entre la representación aragonesa en Madrid. El diputado de Podemos por Zaragoza, Pedro Arrojo, y el que tiene por Huesca la confluencia Alto Aragón en Común, Jorge Luis, votarán previsiblemente contra el Gobierno central. Este amplio consenso de la representación aragonesa se podría resquebrajar con el paso de los meses. Todo apunta a que el compromiso del PP, PSOE y Ciudadanos tiene como premisa que haya elecciones en enero. En caso de que no suceda, la posición de los parlamentarios aragoneses estará más dividida.
El papel del presidente de la DGA
La participación aragonesa en las Cortes Generales ante la intervención de Cataluña tenía hasta ayer un posible protagonista más: el presidente del Gobierno de Aragón. Sin embargo, la Mesa del Senado acordó ayer evitar esa posibilidad. Así, la comisión parlamentaria que debe liderar el proceso de intervención es la llamada Comisión General de Comunidades Autónomas, a la que tienen derecho a acudir e intervenir los presidentes autonómicos. Sin embargo, solo pueden hacerlo si se reúne de forma individual, no si se convoca de forma conjunta con otra comisión, que es lo que ayer aprobó la Mesa del Senado para cerrar esa vía.
La opción de que interviniesen en el Senado todos los presidentes autonómicos daba cierto vértigo al PSOE, que temía que el debate se polarizase aún más, una vez que es previsible que presidentes de autonomías como Aragón, Castilla-La Mancha y Castilla y León dejasen claro que en el proceso que pueda venir después de la intervención no permitirán tratos diferenciales. Tal como ha quedado ahora formulado, solo podrán intervenir los senadores y el hasta ahora presidente catalán, Carles Puigdemont, quien previsiblemente no acudirá.
