Padres y profesores discrepan sobre el adelanto a junio de las recuperaciones

La comunidad educativa no se pone de acuerdo sobre si es mejor que los exámenes sigan en septiembre.

El nuevo curso traerá novedades para los profesores interinos.
Padres y profesores discrepan sobre el adelanto a junio de las recuperaciones
A.A./heraldo

La reunión permanente del Consejo Escolar de Aragón, fijada para la semana próxima, será aprovechada por algunos de los participantes en este órgano consultivo para volver a sacar el debate de los exámenes de recuperación y la posibilidad de adelantarlos a junio. En este encuentro, Educación informará sobre las nuevas órdenes de evaluación de bachillerato y la ESO. Según fuentes consultadas ayer, en el artículo que regula las pruebas extraordinarias en estos niveles educativos no queda recogido en qué fecha se harán, cuando en anteriores órdenes se fijaba septiembre. Esto ha llevado a pensar que se suscitará el debate sobre la idoneidad de adelantar a junio estas pruebas, tal y como ya se ha hecho en algunas comunidades.

En este tema, la comunidad educativa no se pone de acuerdo sobre lo que es mejor para los alumnos con asignaturas suspendidas. Según la opinión recabada ayer, que será la que defiendan en la reunión del Consejo Escolar de Aragón, son claros partidarios de que los exámenes sigan haciéndose en septiembre el sindicato CGT y Fecapa, la asociación de padres y madres de la escuela concertada. Fapar, que representa a las familias con niños en la escuela pública, no se pronuncia sobre el mes preferido, pero sí rechaza que septiembre sea la mejor opción. CSIF, por su parte, se muestra partidario de adelantar a junio las pruebas y el resto de sindicatos con representación en el Consejo Escolar –STEA, UGT y CC. OO.– explican que ven beneficios y perjuicios en ambas fechas y que, de momento, no tienen una postura definida.

Alfonso Alegre, de CGT, explicó que lo lógico sería hacerlos en junio para los niveles de 1º y 2º de la ESO y en septiembre para 3º y 4º de la ESO y bachiller. "Pero dado que se debe votar por uno de los meses –dijo–, nos parece que septiembre es lo mejor". En opinión de CGT, es difícil que un alumno con materias suspendidas pueda aprobarlas a la semana siguiente de finalizar el curso. Un argumento que también defienden desde la escuela concertada. Miguel Ángel García Vera, presidente de Fecapa, hace hincapié en el "valor pedagógico del verano" y recuerda que cuando en 2012 se cambiaron de junio a septiembre los exámenes de recuperación, el número de alumnos que aprobaron aumentó.

Fapar, por su parte, opinó que lo ideal sería una evaluación continua que no requiriera de pruebas extraordinarias. Pero dado que debe haberlas, Nieves Burón, secretaria de la organización, descartó septiembre y defendió que los exámenes se hagan después de que se garantice desde el centro la preparación de los alumnos con suspensos, sin coste para las familias.

Favorable a junio se mostró CSIF. Alfonso Zafra dijo que adelantar los exámenes beneficiaría a la organización y planificación de los centros educativos y que permitiría a los alumnos contar con más tiempo para sus matrículas. El resto de las formaciones sindicales dijeron que no tenían una postura definida, que lo mejor sería una evaluación continua y reclamaron que Educación haga un informe sobre las ventajas e inconvenientes del adelanto.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión