Gimeno pide a Montoro que ninguna comunidad pierda recursos en el nuevo modelo de financiación

El consejero de Hacienda del Gobierno de Aragón ha advertido que, en caso de perder recursos económicos, se tendrían que aplicar recortes en los servicios públicos.

Saenz de Santamaría y Cristobal Montoro han presidido la runión
Saenz de Santamaría y Cristobal Montoro han presidido la runión
Efe/Chema Moya

El consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, ha pedido este jueves al ministro Cristóbal Montoro que en la reforma del modelo de financiación ninguna comunidad pierda el volumen de recursos de los que disponen en la actualidad, porque si eso ocurriera, habría que llevar a cabo recortes en servicios públicos.

Gimeno, en declaraciones a los medios al término del Consejo de Política Fiscal y Financiera que ha reunido a las autonomías con el Gobierno, ha dejado claro que Aragón no está bien financiada con el actual sistema, algo que el grupo de expertos creado por el Gobierno y las propias comunidades habían sugerido.

Asimismo, ha llamado la atención sobre el alto nivel de oposición que ha cosechado el Ejecutivo de Mariano Rajoy a su propuesta sobre los niveles de endeudamiento de cada comunidad.

Aragón ha formado parte del grupo de nueve autonomías que han votado en contra de la misma, junto a las otras seis gobernadas por el PSOE, más Cataluña y Cantabria.

Ese punto del orden del día apenas ha llevado tiempo, a diferencia de la última sección de "ruegos y preguntas", ya que ha sido entonces cuando el Gobierno y las comunidades han comenzado a deliberar sobre el nuevo sistema de financiación autonómica.

Los consejeros han recibido el informe que la comisión de expertos ha redactado, y en el que al tiempo que muestra un detallado diagnóstico del modelo vigente, plantea una sucesión de propuestas destinadas a sentar las bases del futuro modelo.

Según ha señalado Gimeno, tanto el Gobierno como las comunidades han coincidido en que, una vez hecho el citado informe, la reforma debe "tirar hacia adelante".

El texto caerá ahora en manos de la comisión técnica del Consejo de Política Fiscal y Financiera (que congrega a técnicos de los departamentos de Hacienda del Ejecutivo y de los gobiernos regionales), de tal manera que en septiembre comenzarán los debates y el intercambio de propuestas e información.

Con la mirada puesta en noviembre, esa comisión técnica ultimará su documento, ya con propuestas muy concretas. "Esto hay que hacerlo lo antes posible", ha dicho el consejero aragonés.

Por ello, ha incidido en que todo lo que se debata en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera, en los planos técnico y político, tendrá que traducirse en un proyecto de ley orgánica que remitir al Congreso y aprobarse allí, lo que exige un trabajo previo de consenso parlamentario.

A este respecto, tal y como ha apuntado Gimeno, el Gobierno "ha venido a insinuar que si no hay mayoría", no llevará el proyecto al Congreso.

Gimeno, durante la reunión, y además de recordar el voto particular de Aragón en el citado informe, ha recordado que su comunidad no está bien financiada en la actualidad, pero ha pedido que en la reforma se mantenga el "statu quo" de cada autonomías; es decir, que ninguna sufra un descenso del volumen de recursos del que disponen ahora.

Si eso sucediera, habría que recortar el presupuesto de los servicios públicos.

A su entender, la clave de la reforma consistirá en determinar "las necesidades reales" de financiación, especialmente las relacionadas con el Estado de Bienestar, y a partir de ahí precisar los "ingresos necesarios" para cada territorio.

El contexto de recuperación económica resulta "un buen momento" para abordar la reforma de la financiación autonómica, ha apostillado Gimeno.

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