José Luis Villuendas se quedaba dormido en el trabajo, en casa o, incluso, conduciendo. Unos síntomas, los de la Apnea del sueño, que, asegura, comenzaron a manifestarse desde que era “un crío”. Por aquel entonces, el desconocimiento y la falta de información sobre este trastorno del sueño en el que la respiración se interrumpe o se hace muy superficial, ralentizaron sobremanera la detección de su dolencia.

A sus 59 años y gracias a la medicación y al uso de un dispositivo portátil que se utiliza durante la noche y que mantiene abiertas las vías aéreas para evitar estos episodios, Villuendas, diagnosticado al cumplir 42, recuerda cómo por aquel entonces “nadie sabía de lo que se trataba”. “Me decían que tenía ansiedad, me levantaba siempre reventado y poco a poco me fui desgastando”, explica.

Hasta que esta dolencia lo postró en una cama durante 16 meses. “Empezó con un mareo. Pensé que era por un exceso de trabajo hasta que me detectaron la enfermedad”, asegura. En su opinión, ahora que se está dando más difusión sobre esta patología es necesario que se le dé la importancia que se merece. “Hay otros que no lo han podido contar y es un tema muy grave”, concluye.

Por su parte, Belinda Arrieta se percató de que algo no iba bien cuando su marido comenzó a quejarse de sus fuertes ronquidos y de algunos extraños movimientos nocturnos. Esta vecina de Zaragoza de 58 años descubrió que tenía apnea hace 5. “Tras varias pruebas me derivaron a la Unidad del Sueño del Miguel Servet donde me diagnosticaron”, explica.

Tras pasar algún tiempo durmiendo en camas separadas, el tratamiento le ha permitido volver a la normalidad. “La gente cree que un roncador está durmiendo a pierna suelta pero es todo lo contrario. Es muy peligroso y cada vez hay más casos”, afirma.

El caso de otra zaragozana, Conchita Puente (63), es algo distinto ya que padece insomnio, una dificultad severa para conciliar el sueño. “Tras más de 20 años trabajando en el San Juan de Dios de noches y cambiar el turno no fui capaz de acostumbrarme al cambio”, recuerda. Explica cómo se echaba a la cama muy nerviosa. “No dejaba de darle vueltas a la cabeza”, afirma. Por eso, el yoga, el deporte y una alimentación equilibrada han sido fundamentales a la hora de volver a recuperar unos hábitos de sueño normal.

Tanto Conchita como más de 1.500 personas en toda España forman parte de Asenarco, la Asociación Española del Sueño que fue fundada en Zaragoza hace 25 años. María José Serrano es una de sus fundadoras. “En 1998, cuando era abogada, tuve que defender un caso de invalidez por narcolepsia-cataplejía y fue muy complicado porque estaba considerada como una enfermedad rara pero lo conseguimos”, recuerda.

Tras reunir a varias personas con esta misma enfermedad decidieron abrirse a nuevas enfermedades del sueño, y así nacería la única asociación estatal dedicada a este tipo de enfermedades. ¿El objetivo? “Lograr una mayor concienciación sobre la importancia del sueño y fomentar la detección precoz de este tipo de enfermedades tan peligrosas”, asevera.

“Pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo, y si se hace mal esto afecta a los otros dos. Actualmente tan solo se han diagnosticado un 10% de los casos reales en nuestro país por eso es importante seguir investigando en este campo”, añade.

Higiene del sueño

“La mitad de la población española ronca, sin embargo este ronquido no siempre es patológico, eso dependerá de que vaya o no acompañado de una apnea”, explica María Ángeles Abad Blasco, Trabajadora Social de Asenarco.

“El sueño se divide en ciclos de unos 90 minutos a una hora y media de duración. Las dos primeras son las fases de sueño ligero, tercera y cuarta se denominan de fase profunda y la quinta sería la denominada REM pero no hay dos noches iguales”, añade. Según la experta este dato es muy importante para desmontar falsos mitos como el mínimo necesario de horas diarias de sueño: “Cada persona tiene una necesidad que variará según la etapa, el momento, el trabajo… es lo que denominamos higiene del sueño”.

Precisamente desde Asenarco presentaban este mes de junio su ‘Guía del sueño’, durante el ciclo ‘En ruta con la ciencia: ciencia para la sociedad’ de la mano de la periodista de HERALDO Ana Esteban. En este estudio incluyen información específica, un listado de patologías del sueño, datos y consejos para dormir mejor. “Se trata de una guía absolutamente innovadora basada en la experiencia de los casos tratados durante estos 25 años”, asegura Abad.

?