Aragón reduce la tuberculosis bovina tras una intensa criba

Aragón ha logrado reducir drásticamente la tubercusolis bovina gracias a una intensificación de los controles que ha tenido como eje principal el saneamiento del sector de lidia. En 2012, según la información facilitada por el Gobierno autonómico, 309 animales de los 324.861 que había dados de alta fueron sacrificados por dar positivo en las pruebas sanitarias; en 2016, esa cifra se redujo hasta los 59 casos entre un total de 313.659 cabezas. La provincia más afectada en los ejercicios tomados como referencia fue Huesca, con 169 y 29 positivos, respectivamente. Seguidamente, aparecen Zaragoza (109 y 28) y Teruel (31 y 2).

Los tres territorios mantuvieron una evolución estable en el periodo analizado, a excepción del repunte experimentado por Zaragoza en 2015, coincidiendo con el impacto del plan de erradicación de la tuberculosis bovina -puesto en marcha por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente- y con las particulares medidas ejecutadas por el Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón.

Según explica Enrique Novales, director general de Alimentación y Fomento Agroalimentario, cuando él llegó al cargo (2011) las explotaciones de reses bravas "no eran tratadas del mismo modo que el resto". Una situación que trató de revertir desde la administración. “Entendí que todo lo que se hiciese bien en el ámbito de la tuberculosis repercutiría positivamente en los ganaderos de lidia. Si el sector está perfectamente saneado, ellos son los grandes beneficiados”, recuerda Novales, que en el mencionado 2015 promovió una “limpieza intensiva”. 658 animales fueron eliminados por no ser aptos y 623 (el 95% de ellos) procedían de ganaderías de bravo asentadas en Zaragoza.

“En 2015 nos centramos en el ganado de lidia e hicimos un esfuerzo extra al considerar que era la única forma de sanear la Comunidad rápidamente. No obstante, cabe recordar que fuimos permisivos y no quisimos ahogar a los propietarios. 17 explotaciones ofrecieron resultados positivos en el primer semestre -hay dos controles anuales- y les dimos un margen hasta que en la prueba definitiva (gamma-interferón) volvieron a arrojar malos resultados”, valora Novales, que se siente “satisfecho” por el trabajo desarrollado tanto por la administración como por los propios implicados.

“En 2017 solo ha habido una ganadería -Murillo Romeo, que acaba de desaparecer en Tauste- afectada. Eso nos conduce a pensar que estamos haciendo las cosas bien, pero tenemos que analizar en profundidad lo que ha ocurrido con ese particular caso. Ha sido algo extraordinario y hay que encontrar las razones para seguir avanzando hacia la erradicación de la enfermedad”, prosigue Novales, y ensalza que “la mayoría de las comunidades autónomas están peor que Aragón”.

La prevalencia de la tuberculosis en el rebaño de vacas aragonesas, tasa que se emplea para establecer la comparativa entre regiones, es del 0,75% actualmente. Andalucía (17%), Extremadura (12%) y Castilla la Mancha (7,5%) ofrecen los datos más alarmantes, al situarse muy por encima de la media española (2,75%). Por su parte, Canarias es la única declarada oficialmente “indemne” por la Unión Europea. Allí no se han registrado infecciones en los últimos seis años.