La jornada continua triunfa en el medio rural

Más de 50 pueblos ya tienen jornada continua. Y esta cifra puede aumentar considerablemente el próximo curso.

Aula del colegio de Erla en la Comarca de las Cinco Villas.
Actividad de animación a la lectura en el colegio de Erla, con jornada continua.
CRA Monlora

El colegio Monzón III fue el primero de Aragón que tuvo jornada continua (desde su inicio, en septiembre de 2013). Ahora, todos los colegios de esta localidad oscense tienen este modelo de jornada, así como todos los de La Puebla de Alfindén, los de María de Huerva y los públicos de Alcañiz. Más de 50 localidades tienen ya jornada continua. Y un gran número de escuelas rurales pueden sumarse el próximo curso. La jornada continua triunfa especialmente en el medio rural.


Ahora está abierto el proceso para solicitar el cambio de jornada. La semana pasada terminó el plazo para presentar los proyectos de innovación y tiempos escolares. En total, el Departamento de Educación ha recibido 128 proyectos: 82 de la provincia de Zaragoza, 19 de Huesca y 27 de Teruel. La DGA tiene un mes para analizar las propuestas y entre el 13 y el 15 de marzo votarán las familias en los colegios.Mucha expectación en los CRA


El año pasado se aprobaron 79 proyectos, que incluían a 3 centros rurales agrupados (CRA): Turia, L'Albardín y Monlora. Este curso, se han presentado 37 CRA, la mitad de los centros rurales aragoneses. De estos, 16 están en Zaragoza, 14 en Teruel y 7 en Huesca. Cada CRA suele agrupar a entre 4 y 8 localidades.


"Estamos muy contentos con los datos. Se han presentado muchos centros y las familias tendrán la opción de decidir", destaca Miriam Ortega, portavoz de la Plataforma por la jornada continua. La nueva orden de tiempos escolares ha flexibilizado la normativa para los CRA. El curso pasado se exigía el voto favorable del 55% de los padres de cada uno de los colegios que componen el CRA. Ahora bastará con que dos tercios de las localidades superen ese porcentaje.


En el CRA Luis Buñuel de PInsoro se quedaron a las puertas el curso pasado y ahora han vuelto a presentar un proyecto. Su horario lectivo es de 9.30 a 13.00 y de 15.00 a 17.00. Quieren ir de 9.00 a 14.00. "Creemos que la jornada continua beneficiará a los niños y a la organización de las familias. Ahora, los que vamos por la tarde a extraescolares a otros pueblos más grandes vamos muy justos de tiempo", apunta Alicia González, presidente de la asociación de padres del CRA y madre de un niño de 4 años que estudia en Valareña.Capitales comarcales y pueblos pequeños


La jornada continua ya está muy presente en el medio rural y la Plataforma destaca que también se están sumando centros concertados. En Alcañiz, los tres colegios públicos de la localidad aprobaron el cambio de jornada el curso pasado y ahora lo ha pedido el concertado La Inmaculada. En Calatayud la situación es similar: los tres colegios públicos ya tienen jornada continua y ahora ha presentado proyecto el concertado Santa Ana.


En localidades medianas del entorno de Zaragoza hay un gran apoyo a la jornada continua. En Utebo la tiene el Octavus y ahora la han pedido los otros tres colegios del pueblo. En La Puebla de Alfindén y María de Huerva todos tienen ya solo clases por la mañana.


Los colegios rurales que han estrenado la jornada continua este curso están en general contentos. "La experiencia es muy buena. Los padres nos dicen que los niños tienen más tiempo para los deberes y las extraescolares. Los profesores aprecian que la última hora lectiva de la mañana se aprovecha más que las de la tarde. El comedor apenas ha variado y las actividades por la tarde en el centro funcionan bien", explica Mónica Puy, jefa de estudios del colegio Joaquín Costa de Monzón.


Los colegios públicos Joaquín Costa y Aragón, y los concertados Minte y Santa Ana han seguido los pasos del Monzón III. Todos los niños de la localidad tienen jornada continua. En el Joaquín Costa han pasado de un horario lectivo de 10.00 a 13.00 y de 15.00 a 16.30 a ir de 9.00 a 14.00. Los niños que usan el comedor salen a las 15.15 o a las 16.00.


Las familias consideran que la jornada continua facilita los desplazamientos al colegio en el medio rural. En pueblos pequeños, es habitual que los niños vayan solos andando a partir de los 8 años. Y los que van en autobús, aprecian llegar antes a casa tras las clases.


"Estamos todos contentos, padres y profesores. Pensábamos que la última hora se les haría más dura, pero los niños están más activos y receptivos que con el horario partido. Se aprovecha más el tiempo, sobre todo en invierno, que se hace de noche tan pronto", cuenta Macarena Nebot, profesora del colegio de Riodeva, perteneciente al CRA Turia, y que ha vivido estos últimos días rodeado de nieve. Las clases son de 9.30 a 14.30. Por la tarde tienen una hora de refuerzo a la que asisten todos los alumnos (6 en Riodeva).

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión