Varias poblaciones y barrios zaragozanos se quedaron a mediados del año 1991 sin cuartelillo de la Guardia Civil, como consecuencia de la puesta en marcha del Plan de reestructuración de la Guardia Civil, una medida adoptada para reorganizar los efectivos humanos y la adecuación de los puestos como bases para optimizar la operatividad del Instituto armado.

En una primera fase se desmantelaron los de Ricla, El Frasno, Sierra de Luna, Uncastillo, Ardisa, Magallón y Monegrillo; y los de los barrios de Movera , La Cartuja y Villamayor. Pese a que hubo protestas de los municipios y barrios afectados no hubo marcha atrás y los 60 guardias que ocupaban aquellos cuarteles fueron destinados a Casetas, Utebo, Casablanca, La Almunia de Doña Godina, Alfajarín y Mallén.

Una década después, en abril de 2001, este acuartelamiento dejó de tener relación con la Guardia Civil, pasando a ser gestionado por el GIESE (Gerencia de Infraestructuras de la Seguridad del Estado), dependiente del Ministerio del interior, explican fuentes de la Comandancia, que también señalan que “los primeros efectivos que tuvieron entrada en el cuartel de Movera lo hicieron en el año 1949”.

Tras varias subastas a partir de ese año -alguna de ellas quedó desierta- este edificio singular fue adquirido finalmente por Ángel Burguete “en 2008, creo recordar, pero no la habíamos puesto antes a la venta porque ha costado 4 o 5 años conseguir que el Ayuntamiento cambiase el uso del inmueble, ya que antes era propiedad del Ministerio del Interior, a actividades relacionadas con el sector servicios”, explica el propietario.

El edificio se ofrece en venta o alquiler y hasta el momento Burguete ya ha recibido algunas ofertas, “una de ellas relacionada con habilitar el espacio para la acogida de refugiados, -revela-. El cuartel podría reconvertirse en un centro dedicado a actividades como el arte, el deporte, la salud, o albergar una academia de enseñanza”, apunta.

La fachada y todo el exterior del edificio se encuentra en buen estado, aunque por dentro no puede decirse lo mismo: “En 2005 lo tuvieron que tapiar porque entraron ocupas y se llevaron y destrozaron gran parte de lo que quedaba”, lamenta Burguete. El propietario tenía en mente su propio proyecto para este antiguo edificio: una sala multiusos para la realización de actividades lúdicas y deportivas.

El exalcalde de Movera Ismael Abadía recuerda el cuartel de la Guardia Civil “de toda la vida. A comienzos de los años 70 los guardias civiles del cuartel patrullaban a caballo”. Abadía cuenta que el colegio junto al que se asienta el acuartelamiento, el Juan Pablo Bonet, “antes era muy pequeñito, la cuarta parte de lo que es ahora, y el edificio de la Guardia Civil lindaba con campos sembrados”

Burguete y Abadía coinciden al señalar que el cuartel de la Guardia Civil de Movera estaba en funcionamiento antes del año 1949. El propietario afirma que consultó en el Archivo Municipal de Zaragoza planos antiguos del terreno sobre el que se ubica el actual edificio “y que eran muy distintos a lo que es hoy en día”.

En los últimos años de actividad en el cuartel de Movera se registró en sus dependencias la fatídica denuncia de la desaparición de Carmen Romero, alumna de la cercana Universidad Laboral, un caso que estos días vuelve a la actualidad con la emisión en el canal autonómico de 'Grupo 2. Homicidios', un filme que mezcla documental y ficción basado en hechos reales.

Sus compañeras de clase colocaron cerca de 400 carteles por toda la ciudad y repartieron octavillas con la palabra 'Desparecida' y su descripción. El texto concluía: “Se ruega si alguien tiene alguna noticia de Carmen llame a la Policía o bien a la Guardia Civil de Movera. Teléfono 570185. Gracias”.