La inversión en TIC se dispara en Aragón: un 45% más en un año

El mayor desembolso se realiza en los gastos en bienes, con casi 100 millones de euros en 2015.

Dos investigadores, en el centro de tecnología de inducción de BSH ubicado junto a la planta de Montañana.
Dos investigadores, en el centro de tecnología de inducción de BSH ubicado junto a la planta de Montañana.

Tras los duros años de la crisis, las empresas aragonesas comienzan a hacer sus primeras inversiones y su destino no es otro que mejorar la tecnología que poseen. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), desde hace un par de años es habitual ver cómo el gasto que las sociedades de Aragón hacen en tecnologías de la información y la comunicación (TIC) no ha dejado de crecer, suponiendo un incremento casi cercano al 80% en dos años y de más del 45% en este último. De hecho, mientras que en 2014 se invertían 132,26 millones de euros (entre las de gran tamaño y las de menos de 10 trabajadores), en 2015 estas cifras superaban los 192 millones de euros.


“Durante estos años, la inversión ha estado paralizada por la crisis, pero en cuanto la situación económica ha empezado a mejorar, las empresas aragonesas están apostando por las nuevas tecnologías”, explica Ricardo Mur, vicepresidente de la Confederación de Empresarios de Aragón. Asimismo, asegura que las compañías son conscientes de que el aumento de la productividad viene precedido por la incorporación de la tecnología. Prueba de ello es que el gasto en bienes ha sido el que más ha aumentado este año, llegando a duplicarse hasta alcanzar los 100 millones de euros.

José Félix Muñoz, investigador de la Fundación Agencia Aragonesa para la Investigación y el Desarrollo (Araid), sostiene que, anteriormente, a una empresa le bastaba con adquirir los ordenadores para los empleados de la oficina, pero ahora el número y variedad de los dispositivos que utilizan los trabajadores se multiplica: "Hay que adquirir smartphones para la red comercial o proporcionar tabletas a los trabajadores de las plantas de producción cuando estas comienzan a incorporarse a la denominada industria 4.0".  Por el contrario, los servidores de uso corporativo están en desuso ya que en muchos casos están siendo sustituidos por servicios en la nube. 

Este interés por las nuevas tecnologías también se produce porque cada vez son más necesarias en todas las áreas de las empresas. “Antes, el uso de las TIC era exclusivo del departamento de informática, pero ahora es una cuestión transversal que afecta a todos los espacios de la compañía”, detalla. Al mismo tiempo, destaca que las nuevas tecnologías se están convirtiendo en un elemento democratizador, ya que en estos momentos pueden ser usadas por todos los tipos de empresas. “Determinadas maquinarias o tecnologías ya no tienen un coste tan elevado como hace años y ahora se pueden adquirir casi por cualquier persona”, recalca.


A pesar de que cada vez haya más máquinas que hacen el trabajo del ser humano y de que el uso de determinadas TIC aumenta la productividad, Mur subraya que no supondrá la desaparición de puestos de trabajo: “Lo que va a ocurrir es que los perfiles de los profesionales contratados se van a transformar. Cada vez será más necesario que tengan la formación adecuada para trabajar con estas tecnologías. Por eso es muy importante el trabajo que se está realizando desde la Universidad de Zaragoza, la Formación Profesional y los cursos del CTA, que están formando a grandes profesionales”. De hecho, apunta que en estos momentos hay un déficit de unos 400 perfiles de este tipo en Aragón.


Además, muchas sociedades deciden realizar cursos de formación para sus empleados con el objetivo de que estén en continua renovación. Ejemplo de ello es que durante el primer trimestre de 2016, más del 20% de las empresas aragonesas apostaron por formar a sus trabajadores. Este hecho se da con especial incidencia en el campo de la industria, pero es menos común dentro del sector de la construcción.

Las redes sociales no despuntan

Según los datos del primer trimestre de 2016, la gran mayoría de las empresas aragonesas ya disponen de ordenador y conexión a internet (más del 70% en las que hay menos de 10 asalariados y 99,8% en el resto). “Internet y las redes sociales permiten a las empresas acceder a un mercado global, como por ejemplo, la venta 'online'”, explica el vicepresidente de la Confederación de Empresarios de Aragón. Sin embargo, la monetización de las redes todavía es una incógnita para muchos. “La gran mayoría desconocen qué retorno va a tener publicitarse a través de las redes sociales”, ejemplifica Mur. Aún así, una cuarta parte pagaron por anunciarse en internet.


En la actualidad, este uso de las redes sociales y de internet está más ligado a las grandes compañías, que cuentan con un departamento específico dedicado a este trabajo. “En estos momentos, casi todas las empresas están más focalizadas en recuperar la senda de la productividad que en la difusión a través de las redes sociales”, reconoce.


Por ello, no es de extrañar que en los últimos años casi no haya variado el número de sociedades que tienen página web y que utilizan algunas redes sociales como Facebook o Twitter. Por ejemplo, según los datos de 2015, casi el 40% de las empresas de más de 10 trabajadores usaban las redes sociales; una cifra que desciende hasta el 28,46% en el caso de las que tienen menos de 10 empleados. Además, los datos referidos a las sociedades más pequeñas han descendido en los últimos tiempos. 

'Big Data', el futuro

Una de las novedades que incluye este estudio es el número de empresas que analizan 'Big Data' (gran cantidad de información recopilada de la que se discierne aquello que es de utilidad para elaborar patrones de comportamiento y diseñar políticas más eficaces). Según los dato del INE, un 5% ya realizan este tipo de estudios. La gran mayoría son llevados a cabo por los propios trabajadores; mientras que alrededor de un tercio se encargan a proveedores externos.


“El 'Big Data' es una de las grandes tendencias dentro del mundo de la empresa, ya que permite interpretar grandes volúmenes de datos y con ello mejorar la competitividad, los procesos productivos u obtener mayor información del mercado”, sostiene Mur. Asimismo, destaca que las compañías son conscientes de su importancia y que en los próximos años su utilización va a vivir una tendencia exponencial.


Otro de los usos de las nuevas tecnologías que empieza a despuntar es el 'cloud computing', un concepto que se refiere a prestar servicios de almacenamiento, acceso y uso de recursos informáticos radicados en la red.


El 15% de las empresas de más de 10 trabajadores ya lo utilizan; mientras que más de un 5% de las compañías pequeñas también lo usan. Una cifra que va creciendo ligeramente año tras año.

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