El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda, José Luis Soro, se reunirá en la primera quincena de octubre con el presidente de Renfe, Pablo Vázquez, en Zaragoza, para analizar las medidas que hay que tomar para garantizar un futuro de calidad para el ferrocarril en la comunidad.

Así lo ha anunciado Soro en el pleno de las Cortes en respuesta a una interpelación formulada por la diputada del PAR Berta Zapater relativa a la participación de Aragón en la planificación y en la gestión de las infraestructuras de titularidad estatal en el territorio de la comunidad.

Ha precisado al respecto que la competencia autonómica respecto al ferrocarril, según fija el Estatuto de Autonomía, es solo de participación. Es decir, "ser oídos, pero poco". 

En el ejercicio de estas competencias, una de las primeras decisiones que tomó Soro tras tomar posesión, en diciembre de 2015, fue dejar sin efecto el convenio con Renfe que establecía que Aragón debía financiar el funcionamiento de las líneas regionales.

No se trató de un acto unilateral, ha precisado, sino una decisión política tomada tras una "negociación dura e intensa" con Renfe, tras la que se firmó un convenio que fijaba un plazo de un año para que la comisión bilateral Aragón-Estado analizara la cuestión y llegara a un acuerdo para el mantenimiento de todas las líneas ferroviarias en la comunidad.

La comisión bilateral, ha reconocido Soro "con amargura", no se ha reunido en todo el año 2016, entre otras cosas por la "deriva" que ha tomado la formación de un gobierno en España tras las primeras elecciones de diciembre de 2015, con lo que en lo que se refiere al ferrocarril este ha sido "un año perdido", ha dicho.

Esta "inestabilidad" de un gobierno en funciones es lo que hace "imposible" tomar decisiones, porque el ejecutivo aragonés no quiere "ñapas", sino replantearse en profundidad el servicio de ferrocarril en la comunidad.

Es en este contexto en el que se producirá la reunión anunciada con el presidente de Renfe, ha dicho. 

Ante las críticas de Zapater por lo que considera inacción y cortoplacismo del gobierno, Soro ha recordado que lo primero que tuvo que hacer cuando llegó al departamento fue "pagar la deuda" del anterior gobierno en cuanto al contrato para el mantenimiento de las líneas.

Precisamente porque se saldó esta deuda, Soro pudo llegar a un entendimiento con Renfe y obtener ese plazo de un año para buscar una solución.