Barba asume la presidencia con el objetivo de asegurar "diálogo y aire fresco"

La izquierda respalda su designación y cierra la crisis institucional por la renuncia de Cosculluela.

La nueva presidenta de las Cortes, Violeta Barba, de Podemos
La nueva presidenta de las Cortes, Violeta Barba, momentos antes de su discurso.
Oliver Duch

La nueva presidenta de las Cortes, la podemista Violeta Barba, se comprometió ayer a trabajar "sin descanso" para poner la institución "al servicio de los ciudadanos", un "lugar abierto donde debatir" y sirva de "amparo ante los poderes". En un discurso muy político, subrayó que frente al "agotamiento" del actual modelo institucional, cuyas "deficiencias" –defendió- salieron a relucir "tras el 15-M", prometió dejarse "la piel" para que entre "aire fresco" al Parlamento. "Hay una clara exigencia de transparencia, de ética pública, de mayor participación. Y este Parlamento tiene el reto de articular todas ellas", ha dicho.


Barba, con 28 años, se ha convertido en la primera mujer y en la persona mas joven que se pone al frente de la primera institución de Aragón, fruto del acuerdo de la izquierda. Los 35 diputados del PSOE, Podemos, CHA e IU respaldaron su designación, tal y como acordaron hace una semana, cerrando así la crisis institucional tras la renuncia del socialista Antonio Cosculluela, anunciada hace más de dos meses. El acuerdo incluía también al socialista Florencio García Madrigal, quien con los mismos apoyos que Barba, 35 de los 67 parlamentarios, accedió a la vicepresidencia que hasta ahora ocupaba la diputada podemista.


La nueva responsable de la Cámara estuvo arropada por el líder de su partido, Pablo Iglesias, y otros dos dirigentes nacionales, Irene Montero y Rafael Mayoral, en una tribuna de invitados que no llegó a llenar. Igualmente asistieron las principales autoridades aragonesas, como el Justicia de Aragón, Fernando García Vicente, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón, Manuel Bellido, el presidente de la Cámara de Cuentas, Antonio Laguarta, y el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve. Sin embargo, no acudió ningún responsable institucional del PSOE, pese a que el presidente de la Diputación Provincial de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero, y los ediles zaragozanos Carlos Pérez Anadón y Roberto Fernández habían confirmado su asistencia en un principio.


Violeta Barba destacó su condición de mujer, incidiendo en que no quedará "en una mera anécdota". Y en un claro mensaje de reivindicación de igualdad, se comprometió como uno de sus objetivo prioritarios a "visibilizar" el rechazo de las Cortes a la violencia de género.


Su breve intervención la acabó de la misma forma que la empezó, comprometiéndose a abrir la institución y convertirla en "refugio y salvaguarda" de los derechos del "pueblo". En este sentido, manifestó que velará por que las instituciones "vuelvan a ser el amparo ante los poderes no democráticos que hoy en días amenazan la soberanía de la comunidad", en referencia a los mercados.


La nueva presidenta de la Cámara no quiso olvidarse en su discurso de su antecesor, al que agradeció expresamente su labor durante el último año. Yesto le sirvió para poner de manifiesto cómo el diálogo que propugna ha permitido salvar la crisis institucional. "De nuevo se ha demostrado que el diálogo y el entendimiento, en definitiva la labor de parlamentar, han permitido llegar a acuerdos y a ello me comprometo", dijo.

Pacto en dos tiempos


Violeta Barba tuvo que compartir el protagonismo con el líder de su partido, Pablo Iglesias, y con el presidente aragonés, Javier Lambán. Ambos comparecieron en uno de los patios de la Aljafería y destacaron el valor del pacto alcanzado por los cuatro partidos de izquierdas frente al enconamiento de la escena política nacional. Dicho acuerdo se ha cerrado en dos tiempos: hace justo una semana, con la cesión de la presidencia de las Cortes a Podemos, y el pasado martes con la firma del compromiso por parte de los mismos de abrir "canales de encuentro" para "impulsar políticas progresistas".


Lo que está aún por ver es cómo se plasmará ese compromiso de diálogo a cuatro, ya que ni el formato ni la periodicidad de las reuniones de trabajo se fijó en el documento que firmaron. El siguiente hito ya está marcado en el calendario, a principios de octubre, cuando se celebre el debate el estado de la comunidad y Lambán se someta a su primer examen.

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