De Tokio a Jaca, para aprender a enseñar español a extranjeros

Durante el mes de agosto, la Universidad de Zaragoza imparte en Jaca cursos de formación inicial y especializada para profesores de la lengua.

Curso de formación especializada en Jaca
De Tokio a Jaca, para aprender a enseñar español a extranjeros
U. Zaragoza

Kiyoko Masaoka se encuentra en Jaca desde el 1 de agosto y estará allí hasta que termine el mes. Esta profesora japonesa de 50 años no ha recorrido miles de kilómetros para pasar sus vacaciones en tierras oscenses, sino que ha volado desde el país nipón para continuar formándose en una lengua que ha convertido en su profesión.


Kiyoko es profesora de español en dos universidades y un instituto de Tokio desde hace cuatro años. Estudió la carrera de Lingüística Española, además de la maestría, pero reconoce que tiene que ampliar sus conocimientos didácticos para poder enseñar mejor el idioma en su país.


Los motivos que la llevaron a comenzar a estudiar español fueron muchos: “Me parecía relativamente fácil porque tiene cinco vocales, al igual que el japonés. No solo me gusta la lengua, también la cultura, la literatura, la idiosincrasia española y la amabilidad de la gente”, cuenta Masaoka. Ella es una de las 50 personas que participan este verano en los Cursos de formación inicial y especializada de profesores de español como lengua extranjera que la Universidad de Zaragoza realiza en Jaca.


Aunque todavía se le escapan algunas expresiones coloquiales, esta profesora japonesa reconoce que todos sus compañeros le ayudan y apoyan en las clases: “Algunos de los temas me resultan complicados pero muy interesantes. Estoy comprobando que en España se enseña el idioma de una manera distinta a en Japón, y estoy conociendo otras formas sencillas y eficaces de impartir las clases y de aprovechar el tiempo de mis alumnos”, relata tras salir de una de las lecciones de formación especializada en la residencia universitaria de Jaca.


Prácticamente desde que se iniciaron estos cursos –la Universidad de Zaragoza fue la primera institución pública nacional que puso en marcha este tipo de enseñanzas-, hace más de veinte años, las plazas se cubren por completo todas las ediciones. El curso de formación inicial -cuenta con el sello de calidad del Instituto Cervantes-, que se desarrolla en Zaragoza durante febrero y marzo, alcanzará el año que viene su 18ª edición. Mientras, el también inicial de Jaca, impartido la primera quincena de agosto, ya suma 28 ediciones; y el de formación especializada de profesores de español como lengua extranjera, que solo se desarrolla en la capital jacetana y que comenzó el día 15, once.


“Miles de personas han realizado ya estos cursos en Aragón. La oferta de plazas para la formación de profesorado siempre se cubre y la demanda se mantiene independientemente de la crisis”, señala Vicente Lagüéns, director de los Cursos de español como lengua extranjera en la institución académica, quien anuncia que el departamento de Lingüística General e Hispánica está diseñando un máster de esta enseñanza que podría comenzar a impartirse el próximo año.


Mientras, en las clases de formación especializada, que concluirán el 26 de agosto y que incluyen prácticas docentes, el perfil mayoritario de los alumnos es el de españoles, normalmente jóvenes, estudiantes o recién licenciados en estudios filológicos que se quieren dedicar a esta profesión. Aunque Kiyoko no es la única participante extranjera, pues un profesor italiano y una polaca tampoco han querido perderse el curso. Para Lagüéns, hay una demanda “cada vez mayor de profesionales de otras áreas que apuestan por formarse en esta materia, con especial interés y relación con los estudios humanísticos”.


En estas lecciones se aborda, entre otros aspectos, la aplicación de las nuevas tecnologías en las clases de español como lengua extranjera, se trata con especial énfasis la enseñanza de los asuntos problemáticos de la lengua –gramática y pragmática-, y se enseña a evaluar y revisar los materiales, manuales y herramientas que se pueden utilizar en el aula. Los aspectos que más quebraderos de cabeza suelen ocasionar son la característica utilización de los tiempos del pasado como el pretérito perfecto simple o el pretérito indefinido, la elección del modo indicativo o el subjuntivo, la diferencia entre los verbos ser y estar, y el problema con preposiciones como por y para. Tanto es así que “dedicamos cuatro horas de clase para cada uno de los temas”, cuenta Vicente Lagüéns, que añade que el programa también incluye las diferentes variedades del español.


Este tipo de cursos, que se ofertan en prácticamente todas las universidades españolas, son una vía, pero no la única, para convertirse en profesor de la lengua. “La formación de español para extranjeros está poco reglada y no existe una carrera como tal. Lo más habitual es estudiar un máster de la temática o realizar cursos de esta naturaleza, que ofrecen el Instituto Cervantes y las diferentes universidades”, señala el director.


Lagüéns no duda en afirmar que esta ocupación supone un nicho de mercado actualmente y puede ser un trabajo a tiempo completo para muchas personas: “Por la importancia del español en el mundo, como segunda lengua más hablada, la existencia de profesorado es necesaria y su solicitud es constante. Se requieren una gran cantidad de profesores en universidades, academias de idiomas, centros europeos y cada vez más en países orientales como China, o en Brasil, que están generando una alta demanda”. Como ejemplo, ocho de los estudiantes que realizaron los cursos de la Universidad de Zaragoza el pasado año están dedicándose profesionalmente a ello e, incluso, algún profesor se ha marchado a Japón a impartir clases y divulgar el idioma.

Una posible oportunidad en el extranjero

Precisamente, salir de España y encontrar una oportunidad laboral en el extranjero es el objetivo de Isabel Galindo, profesora zaragozana que imparte clases de inglés en una academia. Hasta ahora, nunca se había formado en la enseñanza del español, pero lo está haciendo porque entiende que esta nueva faceta profesional puede ayudarle a encontrar trabajo en otros países. Tras este curso, Isabel irá a probar suerte a Reino Unido o Irlanda: “Una de mis opciones es dedicarme a esto. Siempre me ha atraído la idea de vivir fuera y puede ser una forma de buscar y encontrar una salida laboral allí”, relata.


Aunque Galindo reconoce que se ve mucho más capacitada para ser profesora de inglés que de español, quiere perfeccionar su lengua para poder enseñarla. Así, su estancia en Jaca le está aportando muchas cosas: “He entendido cuestiones que, sin asistir a estas clases, no hubiera comprendido. Por ejemplo, el poder explicar por qué se usa el verbo ser y no el estar, o viceversa, algo que para nosotros es tan natural, puede resultar muy complicado. Es nuestra lengua materna, pero simplemente la hemos aprendido e imitado sin pararnos a pensar por qué funciona así”, concluye esta profesora.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión