Las averías que ha sufrido últimamente el acelerador del Hospital Miguel Servet de Zaragoza -cuatro en poco más de veinte días, la última la semana pasada- han obligado a derivar a una veintena de pacientes a otros centros para aliviar la presión asistencial.

En concreto, según ha detallado el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, una decena de personas tuvieron que ser atendidos en el Clínico Universitario, otras tantas en el hospital de Pamplona y tres personas en Madrid.

Celaya, que se ha reunido este martes con los responsables médicos y técnicos del Miguel Servet para abordar los problemas ocasionados con las máquinas, ha anunciado que se exigirá a la empresa responsable de los aparatos certificados de calidad tras los últimos fallos.

Además, ha recordado que se está tramitando la compra de dos nuevos aceleradores. El titular de Sanidad ha detallado que se han presupuestado 3 millones de euros para estas adquisiciones y el contrato saldrá a concurso dentro de un mes. No obstante, los aceleradores no comenzarían a funcionar hasta finales de año dado que requieren un proceso de instalación y calibrado muy complejo.

El jefe de Radiofísica, José Antonio Fonz, ha tranquilizado a los pacientes al recordar que en ningún caso las averías han supuesto la emisión de radiación, ya que estos aparatos dejan de funcionar al detectar un fallo y, además, las recientes averías han sido en sistemas auxiliares como la bomba de agua o el embrague de la mesa. El equipo médico del Servet también ha indicado que los pacientes no empeorarán su diagnostico por la demora en el tratamiento de radioterapia, ya que se ajustan las dosis teniendo en cuenta los retrasos.

Sin embargo, hay que recordar que el Defensor del Paciente pidió la semana pasada a la Fiscalía que investigara la situación ante los repetidos parones del aparato y que intervenga si lo considera necesario.