El Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Villanueva de Sijena solicitarán hoy a la juez que envíe a la Policía a Cataluña a recuperar los 97 bienes del monasterio después de que anoche se confirmara el incumplimiento de la orden judicial que obligaba a la Generalitat a devolverlos antes de las diez de la noche. El presidente Javier Lambán reiteró ayer en Teruel que le instarán a que "haga cumplir la sentencia hasta sus últimas consecuencias", por lo que será la tercera ocasión en que solicitan la intervención policial.

Su postura se oficializará después de que la Generalitat protagonizara ayer la última argucia legal para retener los bienes, que fue respondida con contundencia por el Juzgado de Instrucción de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Huesca. El conseller de Cultura, Santi Vila, remitió un escrito a la juez en la que le informó de que solo devolverá hoy los 53 bienes de menor valor, los que están almacenados en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), una vez lo autorice el Consejo de Gobierno, que se reúne hoy por la mañana.

Vila insiste en que las otras 44 piezas, depositadas en el Museo Diocesano de Lérida, no pueden volver a Aragón. Si hasta ahora sostenía que era por una cuestión legal, porque estos bienes estaban protegidos por la legislación catalana, ayer dio un inesperado giro al sacar a relucir una nueva excusa: el consorcio del museo ilerdense ha presentado una demanda ante los juzgados de Rubí contra la comunidad sanjuanista de Sijena, de nuevo propietaria de los bienes tras anularse las ventas ilegales a Cataluña, exigiéndole que "el importe de los gastos de conservación y/o mejora que ha realizado durante los años de posesión". En dicha demanda, asegura que ostenta un "derecho de retención" hasta que se les compense. Y se lo ha comunicado a la juez oscense en otro escrito que le remitieron ayer, en el que apuntan, además, que la orden judicial que obliga a devolver los bienes no podría hacerse efectiva al no haberse "des-afectado" los bienes.

Lejos de admitir la nueva artimaña catalana, la magistrada Carmen Aznar emitió ayer otra providencia dejando meridianamente claro a la Generalitat que debe acatar la sentencia que emitió hace dos meses declarando nulas las ventas, cuya ejecución provisional reclamaron las autoridades aragonesas. "Se acuerda informar que las obras debe ser entregadas en el monasterio, tal como consta en la sentencia", señala antes de apuntar que, en caso de que no se encuentren las monjas, se devuelvan a la DGA.

Técnicos de la DGA hicieron guardia en el cenobio hasta que expiró el plazo legal y hoy está por ver si el Consejo de Gobierno de Cataluña autoriza finalmente la entrega de las 53 piezas y son depositadas, como comunicó Vila a la juez. La versión oficial ni siquiera coincide con la facilitada por la propia Consejería de Cultura a los medios de comunicación, puesto que condicionó su regreso a los plazos que estipular el MNAC, el museo donde están almacenados.

Javier Lambán afirmó en una visita a Teruel que la DGA ha hecho "todo lo que debía para que el monasterio de Sijena esté en perfecto estado de revista para conservar los bienes". El presidente aunó de nuevo un discurso beligerante respecto a los bienes con la apelación al entendimiento con Cataluña. Dijo que llegó a la presidencia de la DGA "no para avivar el conflicto entre Aragón y Cataluña sino para lo contrario". Lambán insistió, como ya hizo la semana pasada, en que, "por encima de todo", su obligación es "defender los intereses de Aragón".