El plazo legal fijado para la devolución de los 97 bienes de Sijena expira este lunes, pero las autoridades catalanas ya adelantaron la semana pasada a la DGA de que iban a incumplir la orden judicial del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº1 de Huesca. El Gobierno aragonés y el Ayuntamiento de Villanueva de Sijena esperarán hasta mañana para reclamar por tercera vez a la juez que envíe a la Policía a Cataluña para requisar los bienes, repartidos entre los museos Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), Diocesano de Lérida y los de Indumentaria y de Cerámica de Barcelona.

El conseller de Cultura, Santi Vila, ya incumplió el pasado día 20 la resolución judicial que le obligaba a entregar al Ejecutivo aragonés el plan de traslado de las piezas. En vez del citado documento, Santi Vila remitió una carta a la consejera de Educación y Cultura, Mayte Pérez, en la que adelantaba que las piezas no llegarían hoy. Le trasladó que solo estaba dispuesto a entregar que también quebrantará la orden judicial que le obliga a entregar este patrimonio aragonés el próximo lunes: solo está dispuesto a devolver 53 de las 97 piezas, las de menor valor, pero ni tan siquiera concretó una fecha y se limitó a señalar que volverían de forma «inmediata».

Fuentes oficiales de la Generalitat apuntaron que este primer lote de obras podría llegar al monasterio en un plazo de dos semanas. Para hacerlo posible, la Generalitat anunció que autorizaría el envío en el Consejo de Gobierno previsto para mañana.

En este paquete incluye 53 obras que no están catalogadas ni protegidas por la legislación catalana y que ni siquiera han sido expuestas. De hecho, permanecen en los almacenes del MNAC desde su adquisición irregular, que se remonta a los años 1992 y 1994. Dichos bienes ya fueron incluidos en el fallido acuerdo entre los dos gobiernos.

El verdadero interés de Cataluña está en las 44 piezas del monasterio de Sijena que atesora el Museo Diocesano de Lérida. Fueron las primeras que adquirió la Generalitat, concretamente en 1983, y siete de ellas forman parte de la colección permanente del centro: tres cajas sepulcrales de madera pintadas, del siglo XV, y cuatro relieves de alabastro procedentes del retablo de Santa Ana, atribuidos a Gabriel Joly y que se remontan al siglo XVI.

A la espera de que lleguen los 97 bienes, el Gobierno de Aragón ha invertido cerca de 100.000 euros en el acondicionamiento de los antiguos dormitorios del monasterio para la colección artística. Además, ha adjudicado las obras para mejorar las condiciones de la sala capitular, con el objetivo de exponer las pinturas que fueron arrancadas de forma irregular en 1936. Otro juzgado oscense ha dado también la razón a la DGA y al Ayuntamiento de Huesca en este litio y se ha pedido la ejecución provisional para que lleguen ya las pinturas.