Los toros vuelven a Ricla

Casi dos décadas después, la plaza de toros del Gitanillo de Ricla se reabrirá este sábado (18.00) para albergar una corrida de toros. El rejoneador Joao María Branco, David Fandila 'el Fandi', el aragonés Daniel Cuevas y Alberto López Simón serán los encargados de lidiar siete ejemplares del hierro de Guadalmena (Jaén). La recuperación de este coqueto escenario es una apuesta de Ignacio Ríos, quien también regenta los cosos de Calatayud, La Puebla de Alfindén o Ariza.

"Sin considerarme un héroe, trato de rescatar localidades en las que hay interés por la Fiesta y, por diversos motivos, han caído en el olvido", explica Ríos, y subraya que, antes de emprender un proyecto así, es fundamental analizar todos los factores que pueden influir: "Ricla está muy bien situada, en una comarca -la de Valdejalón- de tradición taurina y a escasos 50 kilómetros de Zaragoza capital. Confié en que los aficionados de la zona respondiesen, y estoy más que satisfecho con la primera toma de contacto.

Desde el mismo momento en que se anunció el festejo, el ritmo de venta de entradas ha sido elevado. Circunstancia que augura un éxito rotundo de público. "El recinto tiene capacidad para alrededor de 3.500 personas. No sé si se llegará al lleno, pero lo que sí es seguro es que los tendidos presentarán un maravilloso aspecto", celebra el empresario aragonés, y asocia el gran ambiente que se ha generado a la "concienzuda" elaboración del cartel: "Entiendo que ha quedado una tarde rematada y para todos los gustos. Joao María Branco es uno de los rejoneadores con más progresión; Fandi y López Simón son figuras tan diferentes como atractivas para el espectador; y después está Daniel Cuevas que, como torero aragonés, tiene unas ganas tremendas".

A Cuevas, que entre 2005 y 2008 llegó a torear 92 novilladas y ahora viene de un largo periodo de inactividad, la oportunidad de entrar en la corrida le llegó por sorpresa. "Estaba entrenando como cualquier otro día e Ignacio se presentó en la nave para interesarse por mi situación. Al tiempo, me llamó para decirme que el 21 de mayo me vestía de luces", recuerda el de Alagón, y agradece que se haya contado con él.

"Sé lo complicado que resulta permanecer fuera del circuito. Por eso, aunque siempre intento contar con gente de la tierra, me gusta comprobar que se le da la opción de torear a alguien que mantiene la ilusión y realmente lo merece", concluye Ríos.

La última corrida en Ricla

?Jesulín de Ubrique, Finito de Córdoba y Andrés Sánchez lidiaron el 24 de mayo de 1998 la última corrida que hasta la fecha ha acogido la plaza de toros del Gitanillo de Ricla. Se repartieron siete orejas y un rabo, saliendo a hombros en una tarde en la que se homenajeó a Braulio Lausín, legendario matador local cuyo apodo da nombre al coso. Ese año, se conmemoró el centenario de su nacimiento.