Realizan más de 2.600 requerimientos para mejorar la salud en los centros de trabajo
Llevaron a cabo cuatro programas en 2015: Alta Tasa de Accidentalidad Comparada P-2015, Construcción, Sobreesfuerzos Físicos y Amianto.
El Instituto Aragonés de Seguridad y Salud Laboral (ISSLA), a través de sus técnicos habilitados, realizó el año pasado un total de 2.634 requerimientos para subsanar deficiencias en centros de trabajo.
Como en años anteriores, una gran mayoría de esos requerimientos, el 94%, están relacionados con cinco factores que afectan a las condiciones de trabajo: los equipos de trabajo (35%), los locales (26%), las instalaciones (12%), los equipos de protección colectiva (12%) y los equipos de protección individual (12%).
La memoria de actividades del 2015 desgrana todas las acciones desarrolladas desde el ISSLA y muestra los datos anuales de iniciativas como los cuatro programas aprobados por el Consejo Aragonés de Seguridad y Salud Laboral (CASSL): Alta Tasa de Accidentalidad Comparada P-2015, Construcción, Sobreesfuerzos Físicos y Amianto.
El programa de Alta Tasa de Accidentalidad Comparada incluye a las empresas que durante el año anterior alcanzaron un mínimo de tres accidentes con baja en jornada de trabajo, y un índice de incidencia o tasa de accidentalidad superior en un 25% a la media de la actividad económica en la que se encuadran.
En 2015, dentro de este programa, se actuó en 665 empresas, que representan el 1,05% del total de Aragón y que dan ocupación a 62.144 trabajadores. Estas empresas redujeron el número de accidentes con baja en más de un 18%.
En el programa de construcción, los técnicos realizaron 638 visitas a obras para controlar las condiciones de trabajo, materiales o técnicas de seguridad y salud en las mismas, y requirieron un total de 1.267 medidas. En cuanto a las obras con presencia de amianto, se realizaron 63 visitas para comprobar el cumplimiento del Plan de Trabajo de Amianto.
Se requirieron 23 medidas relacionadas, entre otras cosas, con deficiencias en los equipos de protección para el acceso y trabajos en altura; no delimitar ni señalizar la zona de trabajo con amianto o no utilizar el equipo de protección individual para el desmontaje y retirada de materiales con amianto.
Por último, a través del programa de sobreesfuerzos físicos se estudió, asesoró y realizó el seguimiento de 62 empresas con alta tasa de accidentalidad con baja por un sobreesfuerzo: 226 de los 257 accidentes que registraron el año anterior. Fueron 51 empresas de la provincia de Zaragoza y 11 de Huesca, que en total empleaban a 4.634 trabajadores. Las empresas incluidas en este programa redujeron un 38% el número de accidentes.
