La atípica temporada de esquí se salva en su tramo final

Tras un inicio complicado por la falta de nieve, con la Semana Santa se lograron mejorar las cifras.

La estación de esquí de Formigal.
La estación de esquí de Formigal.
Rafa Gobantes

Las estaciones de esquí españolas empezaron mal la temporada 2015-2016, por la falta de nieve y las temperaturas inusualmente suaves para esa época del año, pero la mayoría de ellas ha logrado salvarla en su último tramo y sobre todo durante las vacaciones de Semana Santa.


La excelente Semana Santa, en la que las estaciones españolas recibieron en su conjunto alrededor de medio millón de esquiadores, fue la mejor de la historia de algunas de ellas.


Ha sido, por tanto, una temporada que ha ido de menos a más, al igual que ha ocurrido en los principales destinos de esquí europeos como Francia o Austria, según la Asociación Turística de Estaciones de Esquí y Montaña (Atudem).


Aunque gran parte de las instalaciones ha dado ya por finalizada la temporada, permanecen aún abiertas Masella (Pirineo Catalán), Sierra Nevada (Sistema Penibético) y todas las estaciones de la Cordillera Cantábrica y del Sistema Central, que irán cerrando entre este fin de semana y el 1 de mayo.


El grupo Aramón, que conforman las estaciones aragonesas de Javalambre y Valdelinares, en Teruel, y Formigal-Panticosa y Cerler, en el Pirineo, asegura que ha cerrado su "mejor temporada del último lustro", tras superar el millón de esquiadores.


Desde el grupo, que gestiona la mayor superficie esquiable de España, con 283 kilómetros, añaden que, a pesar de la escasez de nieve en los inicios, se ha conseguido finalizar la campaña invernal "con un muy buen sabor de boca, el que deja el mejor mes de marzo y la mejor Semana Santa de su historia".


En esta temporada corta y marcada por la meteorología, hubo 135 días de esquí en las instalaciones del grupo aragonés, desde el 28 de noviembre hasta el domingo 10 de abril.


El segundo mayor dominio esquiable, con 150 kilómetros, Baqueira Beret (Pirineo Catalán), también finalizó la temporada con resultados muy positivos, al acoger en sus 128 días en funcionamiento a 888.773 esquiadores, un 13% más que el invierno anterior y un 16% más que hace dos años.


La jornada con más esquiadores en pistas en Baqueira fue el Viernes Santo, 25 de marzo, en la que se contabilizaron más de 17.000 personas, cuando normalmente el día de mayor afluencia coincide en navidades.


En cambio, para la tercera mayor superficie esquiable española, Sierra Nevada, con 106,8 kilómetros, esta temporada de nieve, que aún no ha finalizado, al mantener el 1 de mayo como fecha oficial de clausura, será peor que la anterior en cuanto a la afluencia de visitantes y los resultados económicos, según han indicado fuentes de la estación andaluza.


Aunque la instalación granadina se apuntó la mejor Semana Santa de toda su historia, ésta no podrá compensar las pérdidas generadas por falta de nieve durante el Puente de Diciembre y las vacaciones de Navidad, Fin de Año y Reyes.


Según datos de Atudem, entre un 30% y un 35% de las ventas totales de la temporada del sector de nieve español se concentra en dichos festivos, de los que el Puente de la Constitución supone entre un 5% y un 10% de los ingresos, mientras que el resto, entre un 20% y un 25%.


Respecto de los dominios esquiables andorranos, Grandvalira, que mantuvo abiertas sus instalaciones los 135 días previstos, ha vendido un 4% más de forfaits que un año antes, y encadena cuatro temporadas seguidas de crecimiento, con una dinámica moderadamente al alza de los mercados español, francés, británico y del norte de Europa.


Las dos estaciones de Vallnord, que también han mantenido una regularidad de apertura, destacan sus resultados de la Semana Santa que han supuesto un repunte interanual del 33%, con 40.000 clientes, procedentes, principalmente, de España, Portugal, Francia y Reino Unido.

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