Polémica por la presencia de pulgones en la comida del colegio Foro Romano

Varios platos de brócoli del menú escolar del colegio Foro Romano de Cuarte de Huerva tenían pulgones este jueves. El grupo municipal de Chunta Aragonesista lo ha denunciado y pide que se investigue.

CHA pide más control y cuestiona la calidad del modelo de catering. "Si los niños no pueden comer en casa, la comida tiene que formar parte de la educación con un menú de calidad, no solo en cuanto a materias primas e ingredientes, sino en cuanto a su elaboración. Por eso es muy importante que el colegio tenga cocina propia. Nos estamos jugando la salud de nuestros hijos, que está por encima de la educación", afirma Eduardo Fernández, portavoz adjunto de CHA en el Ayuntamiento de Cuarte y padre de uno de los niños afectados.

Unos 400 niños comen a diario en dos turnos en el colegio Foro Romano, uno de los más saturados de Aragón. Según ha explicado la empresa de catering, Combi Catering, algunos niños del primer turno detectaron pulgones en sus platos. La dirección dio orden de retirar todos los platos de brócoli. Después se revisaron todas las barquetas (los recipientes en los que se conserva y calienta la comida, mediante el sistema de línea fría). Y los niños del segundo turno comieron con normalidad el brócoli, según apunta la empresa.

Combi Catering, que sirve a 32 colegios de Zaragoza, lamenta lo sucedido y señala que fue un hecho puntual. "De 7.000 raciones que servimos de brócoli solo se detectaron cinco pulgones muertos en este colegio. El pulgón es habitual en la verdura. Utilizamos verdura fresca ecológica limpia y cortada. Apostamos por la calidad y la proximidad, aunque hay un pequeño riesgo de que pueda aparecer alguna vez un caracol o pulgón. Su presencia no tiene ningún peligro para la salud. Otra opción sería utilizar verdura congelada, pero preferimos apostar por la verdura fresca", explica Lucía García, responsable de calidad de Combi Catering.Quejas por el sistema de línea fría

"El colegio tiene una extraordinaria calidad educativa. Solo tiene dos problemas: la saturación ante la gran demanda y la mala calidad del catering. Es la primera vez que ocurre algo así, pero el sistema de línea fría sí ha generado muchas quejas", destaca Eduardo Fernández.

El sistema de línea fría se ha ido implantando en los últimos años en todos los colegios aragoneses de manera obligatoria (salvo los pocos que tienen cocina propia). La Plataforma por unos comedores escolares públicos de calidad ha planteado sus dudas respecto a cómo afecta este sistema al sabor y la calidad de la comida.

Con este sistema, las empresas de catering cocinan, envasan los alimentos y los conservan a baja temperatura (unos 4 grados). Se almacena hasta una semana en los colegios y se calienta en hornos antes de servirse.