España dio el pasado mes de julio un paso de gigante en lo que a protección animal se refiere endureciendo las penas que contempla el Código Penal para delitos de este tipo. Pocos meses después, a finales de octubre, por primera vez una persona ingresó en prisión en España por maltratar a un animal. Fue Eugenio Sánchez María, de 41 años y residente en la isla de Mallorca, quien habrá de cargar con esta cruz el resto de sus días. En 2012, Sánchez María apaleó a su caballo Sorky hasta la muerte. Estará ocho meses privado de libertad por estos hechos.

Es cierto que esta condena no fue la primera que contemplaba la cárcel para un delito contra los más indefensos. Antes de que la la jueza María Jesús Campos Barciela, titular del juzgado de lo Penal número 8 de Palma de Mallorca, condenara a Sánchez María, muchos jueces habían dictado este tipo de penas, pero nunca llegaron a ejecutarse. “Se trataba siempre de condenas de cárcel inferiores a dos años de duración que se conmutaban con la promesa de no volver a cometer esos actos delictivos”, explica Silvia Barquero, presidenta de PACMA, el partido político que con más ahínco defiende a los animales en España.

Desde PACMA alaban la decisión de la jueza de Mallorca, una sentencia valiente que consideran “ejemplarizante” y que, aseguran, abrirá la puerta a muchas más. De hecho, pocos días después de que la condena del hombre que mató a su caballo se conociera, en Granada otro hombre fue mandado a prisión por un juez durante ocho meses. El condenado lanzó al perro por el balcón de su casa. El animal murió en el acto.

En Aragón no se han registrado delitos tan graves pero, cada año, más de una decena de personas se sientan en el banquillo por delitos de maltrato y abandono animal. De acuerdo con los datos facilitados por la Delegación del Gobierno en Aragón, el año pasado se registraron en la Comunidad 13 delitos por maltrato (la Guardia Civil también tuvo conocimiento de la comisión de una falta por maltrato e inició dos diligencias por abandono y lesiones en la provincia de Teruel) y en lo que va de año ya se han superado las cifras del año pasado con la comisión de 14 delitos.

Los detalles del último episodio se conocieron esta misma semana. Un braco alemán apareció vagando por las calles de Miedes (Zaragoza) con una cuerda atada alrededor del cuello. La misma le había provocado una profunda herida. A su dueño, además de un presunto delito de maltrato animal, se le denunció por una infracción a la Ley de Protección Animal. Paradójicamente, este mismo individuo fue detenido esta semana por disparar a su exmujer en Elche.

De acuerdo con los datos facilitados por el Ministerio del Interior, el año pasado, en toda España, las fuerzas y cuerpos de seguridad tuvieron noticia de 292 delitos de maltrato o abandono animal. Se consiguieron esclarecer 88 de ellos. El balance fue de 48 detenidos y 161 imputados.

La presidenta de PACMA afirma que la conciencia de la sociedad española respecto a los derechos de los animales ha ido aumentando cada año pero aún queda mucho por hacer. En la misma línea, aunque con matices, se manifestaba David Vieites, investigador del CSIC, con motivo del Día Mundial de los Animales. "El grado de concienciación ciudadana respecto a la protección de los animales, a pesar de haber aumentado mucho en los últimos años gracias a la labor de grupos ecologistas y científicos, es relativamente bajo”, afirmaba.

De la mano de la concienciación debe avanzar la legislación sobre la materia, que actualmente es un absoluto caos: no existe una ley marco común a todo el Estado si no que cada Comunidad tiene sus leyes al respecto. En este sentido desde PACMA resaltan que la ley aragonesa (data de 2003) contempla las sanciones administrativas más elevadas de todo el país: por delitos muy graves la DGA puede tramitar sanciones de hasta 150.000 euros.

“Cada vez se denuncia más”, dicen desde PACMA, “pero sin embargo no hay condenas ejemplarizantes que hagan que el que vaya a maltratar a los animales, se lo piense antes dos veces”, valora la Barquero, que añade que si España quiere igualarse a los países del entorno europeo que son una referencia en protección animal, “debe seguir trabajando”.

El Consistorio refuerza el CMPA

La sensibilidad por los animales abandonados también ha aumentado en el Ayuntamiento de Zaragoza, que recientemente ha sacado un contrato público para contratar un servicio de guardería de perros que apoye al Centro Municipal de Protección Animal (CMPA). Las instalaciones de este servicio municipal han sufrido épocas de colapso no hace demasiado tiempo y desde el Consistorio se quiere evitar esta situación. Por ello, ha presupuestado cerca de 22.000 euros (IVA incluido) para hacerse con un servicio de guardería para 30 perros durante un año.

El contrato no solo incluye el alojamiento de los animales, también “alimentación, limpieza, paseos, vigilancia y atención veterinaria y farmacológica”. En las próximas semanas culminará el procedimiento administrativo de adjudicación.