Las empresas creen que el impuesto de hidrocarburos causará graves perjuicios

Los empresarios alertan de que "se cometería un error si se aprobara su implantación".

La Federación de Empresas de Transporte de Aragón (FET Aragón) se opone a la posible implantación del tramo autonómico del impuesto sobre ventas minoristas de determinados hidrocarburos (IVMDH) en Aragón al alertar de que causará "graves perjuicios" al sector.


Para FET-Aragón "se cometería un error si aprobara su implantación, como se ha planteado desde el Gobierno de Aragón" al argumentar que es un impuesto que "grava doblemente" al conjunto de la población tanto directamente, como por el incremento de precios que provoca en otros productos.


"Se trata de un impuesto sobre un producto básico, casi de primera necesidad para todos los niveles adquisitivos, y que redunda especialmente en deteriorar la capacidad adquisitiva de la población en general", han sintetizado.


Produce, además, incrementos de costes y precios en el resto de sectores y productos por lo que "perjudica el consumo, uno de los motores de la economía aragonesa, y genera muchas protestas en los consumidores", han abundado en una nota de prensa.


La mitad del precio final que paga el consumidor por un litro de gasolina son ya impuestos que gravan los hidrocarburos y en el caso del gasóleo ese porcentaje se eleva al 49,38%.


También han expuesto que perjudicará "enormemente" la competitividad de un sector estratégico para la economía aragonesa, el del transporte y la logística, que según el INE representa el 5,2 por ciento del total de la producción aragonesa y da empleo actualmente a unos 26.000 trabajadores, entre autónomos y asalariados, ya que encarecería sus costes frente a las empresas de comunidades que no lo tienen.Otros gremios

En este sentido los costes de combustible suponen aproximadamente el 30-35 por ciento de los costes de explotación de una empresa de transporte.


De igual modo "perjudicaría sensiblemente a sectores como el gremio de taxi y el de estaciones de servicio, que agrupan a varios miles de trabajadores". La pérdida de competitividad conllevará probablemente pérdidas de puestos de trabajo en los sectores afectados, han augurado.


Además, has apostillado que no lo aplican gran parte de las autonomías limítrofes o próximas a Aragón como Navarra, La Rioja, País Vasco; Cantabria tampoco lo aplica este año y el próximo dejará de aplicarlo Castilla y León.


Esta situación produciría un "efecto frontera" y una fuga de consumos hacia comunidades limítrofes en caso de implantarse en Aragón. Derivado de ello, se obtendría un incremento insignificante de recaudación o incluso una disminución de la misma. Según datos de asociaciones de venta de carburantes, las cuentas ya saldrían negativas para la administración incluso con un descenso de consumos inferior al 10%.


"La no implantación en nuestra Comunidad está permitiendo actualmente unos niveles de consumo más elevados en nuestras las Estaciones de Servicio, con la obtención de mayores ingresos y riqueza para Aragón en detrimento de comunidades limítrofes que lo tienen", han expuesto.


Según datos de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (CORES) tras su implantación en Cantabria y Castilla y León, las ventas de carburantes se redujeron en estas Comunidades (de junio de 2011 a junio de 2012).


De esta forma, en Cantabria la gasolina bajó un 6,6% y el gasóleo un 11,3%; y en Castilla y León la reducción fue de 12,3% y un 32,4% respectivamente. Por el contrario, en el País Vasco, Comunidad Autónoma vecina y sin tramo autonómico, supuso que en Vizcaya la gasolina subiera una 0,5% y el gasóleo un 10,2%; y en Álava el aumento fue del 2,8% y 23,7%, respectivamente.

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