Las ventas de las empresas catalanas a Aragón y al resto de España superan a las que realizan al resto del mundo y más de la mitad de sus principales mercados corresponden a comunidades autónomas, según un estudio difundido este jueves por la entidad Convivencia Cívica Catalana. El informe cita, por ejemplo, que el tejido empresarial de la Comunidad vecina vende más a Aragón (11.560 millones) que todo lo que exporta a Francia (10.435 millones).

La entidad, que se muestra contraria a la independencia y al modelo lingüístico de Cataluña, asegura en el estudio "Análisis del Comercio de Cataluña" que el mercado del resto de España sigue siendo fundamental para la economía catalana.

En este sentido, asegura que las ventas de las empresas catalanas al resto de España se elevan a 61.134 millones, por encima de las efectuadas al resto del mundo (60.526 millones).

La entidad ha utilizado como fuentes en este informe datos del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales de la Agencia Estatal de Administración Tributaria, la base de datos C-Intereg del Centro de Predicción Económica (Ceprede), del Idescat (Instituto de Estadística de Cataluña) el ICEX e institutos nacionales de estadística de Francia, Italia y Alemania.

El estudio afirma que de los 23 mercados donde las empresas catalanas venden más de 1.000 millones de euros anuales, más de la mitad, 13, son comunidades autónomas españolas.

Como ejemplo cita que Cataluña vende más a Cantabria (1.592 millones) que a Estados Unidos (1.583 millones) o que las empresas catalanas venden más a Murcia (1.219 millones) que a China (790 millones), así como facturan más por ventas a La Rioja que a Japón.

Asimismo, según se afirma en el estudio, las empresas catalanas venden más a Aragón (11.560 millones) que todo lo que exporta a Francia (10.435 millones).

Para Convivencia Cívica Catalana, los políticos que abogan por la independencia en función de la fortaleza exportadora de Cataluña no tienen en cuenta esta dependencia de los mercados españoles.

La entidad sostiene que gran parte del volumen de exportación de valor tecnológico no proviene de empresas catalanas, sino de las filiales españolas de multinacionales extranjeras, situadas en Cataluña por proximidad logística a sus países europeos de origen y que, en caso de una hipotética secesión, "serían probables candidatos a una deslocalización hacia el resto de España".

También advierte que la situación geográfica de Cataluña hace que muchas empresas españolas la utilicen de plataforma de su comercio exterior con Europa y que, de producirse una secesión, "muchas empresas del resto de España dejarían de utilizar a Cataluña como tal plataforma de exportación".

Para Convivencia Cívica Catalana, "romper con el resto de España no solo significaría poner en riesgo las ventas de las empresas catalanas a su principal mercado sino también afectaría de forma sensible al volumen de exportaciones, comportando un perjuicio notable para la riqueza, la economía y el bienestar de los ciudadanos catalanes".