Los problemas financieros que arrastra la Comunidad Autónoma podrían paliarse en parte con sendas medidas que el Gobierno de Aragón propondrá este miércoles en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), órgano de coordinación entre las haciendas autonómicas y la estatal. El consejero de Hacienda y Administración Pública, Fernando Gimeno, ha comparecido en la mañana de este martes a petición propia en las Cortes de Aragón para informar sobre la situación financiera de Aragón y la posición que mantendrá mañana en el pleno del CPFF.

Su primera propuesta será empezar a trabajar para cambiar la Ley de Financiación de las Comunidades Autónomas "dada la insuficiencia estructural de recursos con los que se prestan los servicios públicos por parte de las administraciones autonómicas". Pero mucho antes de que esta idea, en caso de salir adelante, pueda empezar a dar resultados, el consejero planteará dos medidas inmediatas que podrían aliviar los problemas financieros de Aragón en 100 millones de euros este mismo año.

Una de estas medidas es incrementar del 98% al 100% los anticipos que percibe la Comunidad a cuenta de su Participación en los Ingresos del Estado (PIE) y anticipar su liquidación dos años, de forma que la percepción íntegra de estos recursos llegue en el ejercicio correspondiente en vez de con dos años de retraso como ocurre en la actualidad. De aceptarse esta propuesta, supondría en la actualidad 59 millones de euros más para Aragón este año.

De igual forma, Fernando Gimeno anunció que solicitará al Estado que adelante el pago de los Fondos de Convergencia Autonómica -es decir, el Fondo de Competitividad y el Fondo de Cooperación- correspondientes a los ejercicios de 2013 y siguientes. De aplicarse este mismo año, esta medida supondría un incremento de 41,9 millones de euros en los ingresos de Aragón, lo que sumado a la medida anterior proporcionaría en total más de 100 millones a la Comunidad.

Junto a estas propuestas, el consejero aragonés también planteará a los demás responsables autonómicos y al ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, una redistribución diferente de los objetivos de déficit entre el Estado y las CC. AA., habida cuenta de que "el esfuerzo fiscal asumido por el Estado en los años de la crisis ha sido mucho menor que el que han tenido que adoptar el conjunto de las Comunidades Autónomas" y, el objetivo del 0,3% establecido para el próximo año "es prácticamente imposible de cumplir".

Finalmente, Fernando Gimeno solicitará en el pleno del CPFF que los planes económicos-financieros (o planes de ajuste) "se presenten ya el próximo otoño, conforme a unas previsiones mejor definidas y con un horizonte claro de saneamiento en el plazo de tres años".

Todas estas propuestas inciden en el campo de los ingresos y la financiación, dado que, como ha resaltado el consejero en las Cortes, "los servicios públicos esenciales no pueden ser disminuidos". "Los ciudadanos no pueden entender que la recuperación económica de la que tanto se habla ahora no vaya acompañada de una recuperación social", dijo.

Y precisó que, aunque el crecimiento llegue al 4% que algunos vaticinan, distará mucho de ser una verdadera recuperación económica, "porque está basada en un viento exterior favorable por la caída del precio del petróleo, la depreciación del euro y la política monetaria expansiva, y sobre todo en una devaluación interior de precios y salarios que ha dejado a mucha gente en el paro o con trabajos precarios y mal pagados, por lo que se ha perjudicado mucho la renta disponible de las familias".

Igualmente resaltó el incremento de las desigualdades sociales, que, como ha puesto de relieve el Fondo Monetario Internacional (FMI), acaba afectando de forma negativa al crecimiento. Y detalló los datos sobre los incumplimientos de los objetivos de déficit, endeudamiento o morosidad, con la única salvedad de los techos de gasto.

El consejero insistió en que es "imposible" cumplir el objetivo de déficit para este año ya que "no estamos dispuestos a hacer recortes en políticas sociales" y criticó los anteriores "incumplimientos sistemáticos" de los objetivos acordados y de las medidas de ajuste para corregir las desviaciones que se producían. En este sentido, ya en el turno de réplica a los grupos parlamentarios, lamentó la pérdida de ingresos que supusieron las bonificaciones fiscales implantadas por el anterior Gobierno autonómico y la renuncia a las subidas aplicadas en otras CC. AA.