El cuerpo de Mixel Pizarro, el aragonés desaparecido en Nepal, no llegó a encontrarse

Las pruebas confirmaron que el otro cadáver hallado sí que era el de su pareja, la cántabra Isabel Ortiz.

Miguel Ángel Pizarro sigue desaparecido en Nepal.
Isabel Ortiz y Miguel Ángel Pizarro
Heraldo

El pasado 6 de junio el Gobierno nepalí informó del hallazgo de los restos de dos españoles en el Valle de Langtang, y los identificó como la pareja formada por la cántabra Isabel Ortiz y el aragonés Mixel Pizarro. Sin embargo, las pruebas de ADN que se realizaron en España posteriormente confirmaron que uno de los cuerpos sí que pertenecía a Ortiz, pero el otro no era el de Pizarro. “El ADN de mi hermano dio negativo”, señala su hermana Estíbaliz.


“Estamos desolados porque nuestra intención era que pudieran ser enterrados juntos, pero con estos resultados ya no sabemos si será posible”, lamenta Estíbaliz. Las familias confiaban en que finalmente hubieran encontrado a los desaparecidos, puesto que en las inmediaciones hallaron una mochila con un pasaporte y objetos personales, lo que hizo pensar que eran ellos. “Con las primeras informaciones que nos dieron empezamos a tener dudas porque en el caso de Isabel sí que se encontraron otros objetos personales como las gafas de sol, pero de mi hermano no había absolutamente nada”, explica.


En declaraciones a Europa Press, David Ortiz, uno de los hermanos de Isabel manifiesta que por un lado sus familiares están "tranquilos", aunque "la herida sigue abierta". Y la "única forma de cerrarla en parte" y de "pasar página" es, según dice, encontrar los restos del novio de su hermana. Así, ha sido "un poco palo" para los allegados de Isabel que el cuerpo hallado junto al suyo no fuera el de Mixel.


En los días posteriores a la localización de los cuerpos, la policía nepalí tomó varias muestras, que fueron trasladadas a España para ser cotejadas con el ADN de la familia de los desaparecidos. “Para conseguir que las muestras llegaran aquí pasaron alrededor de unos 15 días. Ha sido un proceso con muchas trabas”, recalca.


Por ello, hasta el pasado día 5 de julio, no les confirmaron la identidad de los cuerpos y descubrieron que “desgraciadamente” el del hombre no era el de Pizarro. “Las pruebas de ADN han tardado mucho tiempo por el estado en el que se encontraban los restos”, puntualiza Estíbaliz. Asimismo, lamenta la forma en la que están siendo tratados, puesto que los sucesivos contactos, incluso los resultados de las pruebas de ADN, les han llegado a través del correo electrónico.


Ahora, con las esperanzas desvanecidas, Estíbaliz ve cada vez más complicada la posibilidad de encontrar a su hermano. “El valle está cerrado desde el segundo seísmo y aunque se abrió para poder hacer alguna búsqueda, el acceso se limita a momentos aislados porque todavía existen riesgos de desprendimientos”, apostilla. No obstante, en el caso de que apareciera su cuerpo podría ser identificable gracias a su pasaporte y objetos personales. “Aunque dijeron que habían encontrado el pasaporte de los dos, verdaderamente solo estaba el de Isabel y la fotocopia de la primera página del de mi hermano”, sostiene.


Actualmente, la información que recibe la familia Pizarro proviene directamente de la Embajada española en Nepal. “Nosotros hablamos con la gente que está allí y son ellos los que nos ponen al día sobre si han encontrado algún cuerpo más”, sostiene. Al mismo tiempo, insiste en que hace semanas que no tienen noticias por parte del Ministerio de Asuntos Exteriores.


Además, los restos de Isabel Ortiz todavía no han llegado a España. “Ni siquiera saben cuándo podrían llegar, lo único que conocemos es que todos los papeles del seguro se encuentran en Katmandú”, especifica Estíbaliz. Según detalla, desde el momento en el que se confirmó que era Isabel, todo el papeleo y el trabajo ha corrido a cargo del seguro que habían contratado para el viaje. “El Gobierno español no ha hecho nada”, afirma.


La pareja se encontraba por la zona del Valle de Langtang el pasado 25 de abril, cuando un terremoto de una magnitud de 7,8 sacudió Nepal. Quince días después, otro de magnitud 7,4 volvió a aterrorizar a los nepaíes. Cuando ocurrió este devastador hecho, más de 300 españoles se encontraban en el país, de los cuales todavía se está buscando a cinco: los asturianos Sabino Fernández, Jesús Monteirín, Egidio García y Ángel Hernández Muñiz y el aragonés Mixel Pizarro.


El terremoto se cobró la vida de casi 9.000 personas, entre ellas la catalana Roser Palau y la cántabra y pareja de Pizarro, Isabel Ortiz, los dos únicas que han podido ser rescatadas hasta la fecha.

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