"Las condiciones de las becas de libros no son justas y dejan a mucha gente fuera"

Cerca de 16.000 alumnos de Primaria y Secundaria han recibido beca para libros en el pasado curso escolar y para el próximo lo harán al menos 561 más, según al resolución provisional de la convocatoria. Sin embargo, desde FAPAR denuncian que las becas "son insuficientes" y no llegan a cubrir todas las necesidades. La realidad es que sin la ayuda de los bancos de libros y de la solidaridad, muchas familias no podrían comprar disponer de libros de texto para sus hijos.

Como le ha ocurrido a Chus Pascual estos últimos cuatro años. Cuando se eliminó el programa de gratuidad, su hija empezó el instituto. En ese momento, tanto su marido como ella estaban en el paro y pidieron la beca. "Pero como miran la declaración de la renta de dos años atrás, nos la denegaron. Reclamé pero no sirvió de nada", cuenta Chus, miembro del Consejo Escolar del instituto Tiempos Modernos. Ese curso lo salvaron gracias al banco de libros del instituto.

Al año siguiente, su situación económica había empeorado, ambos seguían en el paro, con ingresos anuales de 3.600 euros. "Nos concedieron media beca, pero al final no recibimos nada porque no había dinero. El instituto había cambiado muchos libros y no pudimos utilizar el banco de libros.Un familiar nos prestó dinero para comprarlos", explica.

En 3º le dieron media beca, o sea, 115 euros (esta vez sí llegó el dinero). "Con ese dinero sólo pudimos comprar los libros y cuadernillos de inglés y francés. Los demás los tuve que pagar y algunos me los prestaron", apunta. Para el próximo curso le han vuelto a conceder media beca, cuando el coste total del lote nuevo ronda los 300 euros. Confía en poder utilizar de nuevo el banco de libros. Aunque calcula que deberá gastarse cerca de 100 euros.

El próximo septiembre la chica empezará 4º de la ESO. Es una alumna brillante, con buen expediente y le gustaría hacer el Bachillerato Artístico. El padre sigue en paro. Su último trabajo fue en una empresa de construcción en la Expo. La madre trabaja desde hace unos meses de administrativa en una agencia inmobiliaria, no llega a mileurista. Su hermano, con 20 años, terminó de estudiar y ha empezado a trabajar en un almacén.

"Las condiciones de las becas no son justas y no llegan a todas las familias necesitadas. Hay gente con muchos problemas para afrontar los gastos de principio de curso. No se debería tener en cuenta la situación económica de hace dos años, sino la actual. La gratuidad de los libros de texto fomentaba una escuela más igualitaria", apunta Chus.

El Gobierno de Aragón destina 2,5 millones de euros a becas de libros (el 66% para ayudas enteras y el resto para medias). Las familias con menos ingresos reciben la beca entera y las que cobran hasta 13.000 euros tienen derecho a media. FAPAR advierte de que ha aumentado el empobrecimiento de las familias y por lo tanto ha bajado el umbral a partir del cual pueden cobrar la ayuda entera. Hace dos años, familias que ganaban 9.000 tenían derecho a beca completa. El año pasado, el umbral se situó en unos 5.000. Y para el próximo curso, rondará los 3.000.