Los trabajadores de un centro de menores denuncian intentos de adjudicar su gestión "a dedo"

Al parecer, representantes de una empresa privada visitaron el lunes las instalaciones.

Los educadores del centro de menores llevan en huelga desde noviembre
Los educadores del centro de menores llevan en huelga desde noviembre
José Miguel Marco

Representantes de la empresa privada Consulting Asistencial Sociosanitario visitaron este lunes las instalaciones del Centro de Observación y Acogida de Menores de Aragón (COA) en compañía de responsables del servicio de menores del IASS, según informaron este martes los trabajadores del centro y fuentes de la propia empresa.


Javier Itxaso, educador del centro, asegura haber mantenido "una charla en el despacho" con los representantes de esta empresa quienes, según su versión, le informaron de que habían recibido una llamada desde el propio IASS "el jueves previo a las elecciones" citándoles para el lunes (un día después de las elecciones autonómicas) "e intentar cerrar el contrato para la gestión del centro".


Desde el Gobierno de Aragón niegan estas informaciones y califican de "totalmente falsa" la versión del educador. Según informaron este martes a Heraldo.es "este tema esta parado y será el próximo Gobierno quien decida qué curso debe llevar este asunto. El actual Ejecutivo está en funciones y por responsabilidad, coherencia y respeto no va a firmar nada ni va a adjudicar ningún contrato para la gestión del COA". Aunque estas mismas fuentes ni confirmaron ni desmintieron la visita del lunes.

Un año de conflictos

El COA es el centro al que van los menores cuando los servicios sociales se ven obligados a sacarlos de manera urgente de su entorno familiar para protegerlos en situaciones hostiles o de riesgo (abusos, maltratos, etc) y donde pasan una breve estancia hasta que se les encuentra un destino más apropiado.


Este centro ha sido gestionado durante doce años por la Fundación para Atención Integral del Menor (FAIM) pero el contrato finalizó en mayo de 2014 y en diciembre esta fundación se declaró incapaz de continuar con la gestión bajo las condiciones marcadas por los nuevos pliegos.


De hecho, cuando en noviembre se conocieron las condiciones de los pliegos, los educadores del centro comenzaron una huelga indefinida (que continúan a día de hoy) y el concurso para adjudicar la nueva concesión quedó desierto en diciembre. 


Ante esta situación, el Ejecutivo autonómico podría redactar unos nuevos pliegos y volver a sacar la concesión a licitación o contactar directamente con empresas interesadas y adjudicar su gestión por procedimiento negociado.


En enero el consejero de Sanidad y Bienestar Social del Gobierno de Aragón, Ricardo Oliván, anunció ante los medios de comunicación que el propio IASS asumiría la gestión del centro con 26 educadores sacados de la bolsa de interinos.


Sin embargo, a día de hoy la FAIM sigue gestionando el centro de menores y lleva haciéndolo un año 'de manera provisional'. Según sus trabajadores, el propio IASS les informó en febrero de que se iba a iniciar un procedimiento negociado que se pretendía cerrar "antes del verano" y para el que se barajaban "tres empresas".

Visitas de otras empresas

De hecho fueron varias las empresas privadas que visitaron las instalaciones del centro en febrero, según confirman los educadores del centro, quienes presenciaron estas visitas y entregaron a sus representantes una carta informándoles "del nulo respeto hacia los derechos de los menores exhibido por el antiguo Ejecutivo" y que para ellos quedó patente en la redacción de unos pliegos "abusivos y escandalosos que no aseguraban una buena atención a los menores".


"Parece que no llegaron a ningún acuerdo con las empresas que vinieron en febrero y después, durante marzo, abril y mayo, ha habido un silencio absoluto sobre este tema", comenta Itxaso. Silencio que se rompió este lunes con la "sorprendente visita postelectoral" de otra empresa privada al centro de menores y que reabre el debate sobre la conveniencia o no de adjudicar el contrato de gestión de un recurso "público y esencial" directamente a un empresa privada tras haber quedado desierto el concurso público por sus "ajustadas" condiciones.


Desde el IASS aseguran que el Ejecutivo en funciones no va a firmar ni a adjudicar ningún contrato hasta que se forme el nuevo Gobierno por razones de "responsabilidad, coherencia y respeto".