Los consejeros de Medio Ambiente de Aragón, Navarra y La Rioja, las tres comunidades autónomas más afectadas por la crecida del río Ebro, han defendido la prioridad de paliar los daños y afecciones causados tanto a la zona como a los habitantes de la misma.

Así, el consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente aragonés, Modesto Lobón, ha considerado en rueda de prensa en Zaragoza que lo primero que se debe hacer es que los daños queden resueltos o bien por los seguros o por las propias Administraciones, para restaurar así el patrimonio perdido de los agricultores.

En segundo, ha abogado porque se realice un listado de actuaciones a nivel estatal y autonómico, además de revisar la legislación ambiental para evitar complicaciones futuras.

Lobón ha defendido la necesidad de "resolver los efectos y atajar las causas", así como de llevar a cabo la limpieza del tramo medio del Ebro.

De momento el ejecutivo autonómico no maneja ningún balance de daños debido a que las diferentes zonas están aún inundadas, ha indicado.

Por su parte, su homólogo riojano, Íñigo Nagore, ha valorado que el Gobierno central vaya a tomar medidas al respecto y ha asegurado que todo lo que no se cubra desde Madrid lo complementarán las comunidades autónomas.

Asimismo, ha destacado la coordinación entre el Ministerio y las tres autonomías afectadas, ha manifestado la necesidad de establecer una planificación a medio y largo plazo sobre "cómo queremos gestionar nuestro río Ebro" y se ha mostrado partidario de "actuar dentro del cauce".

El consejero del ramo de Navarra, José Javier Esparza, ha reiterado el carácter "extraordinario" de la crecida del río y ha expresado que mantienen la "expectación" por ver cómo se desarrollan los acontecimientos en las próximas semanas.

Además, ha pedido más ayudas a las poblaciones dañadas y a los agricultores afectados.

"Lo primero son las localidades y la actividad económica", ha dicho.