Los socialistas zaragozanos exhibieron ayer músculo en Ejea de los Caballeros a ocho meses de las elecciones con la movilización de 250 ediles contra el "caciqueo" de la reforma electoral del PP. La jornada fue previa a la celebración del Día de la Rosa, en la que el secretario federal del partido, César Luena, se sumó a las críticas acusando a los populares de hacer "trampas" con la modificación legal que pretende implantar la elección directa de alcaldes. Dicha reforma es calificada de "oportunista y prepotente" en el manifiesto que rubricaron los socialistas, que achaca todo al "miedo a perder alcaldías" en las filas del PP.

El secretario provincial del  PSOE y alcalde de Épila, Martín Llanas, aún fue más lejos al tildar la reforma de "golpe de estado antidemocrático" y de cuestionar al PP por preocuparse únicamente de intentar asegurar las alcaldías de las grandes ciudades y no de solventar el problema de la financiación local que ahoga a los municipios. "Es una falta de respeto absoluta", dijo antes de lamentar que barones del PP pretendan ahora que la elección directa sirva también para los presidentes autonómicos.

En la jornada municipal estuvieron presentes hasta 148 alcaldes y contó con la asistencia de la ejeana Susana Sumelzo, diputada nacional y secretaria federal de Administraciones Públicas. Al igual que el resto, mostró su "más absoluto rechazo" a los planes del PP, al que exigió que ponga fin a los recortes en vez de impulsar una reforma que no pide la sociedad española. Al igual que el resto, Sumelzo secundó un manifiesto que subraya que la reforma electoral planteada por el PSOE en 1998 era distinta.

Todos los ediles se sumaron después a la celebración del Día de la Rosa del PSOE-Zaragoza, que congregó a unas 1.200 cargos y militantes en el polideportivo de Ejea de los Caballeros. Intervinieron la alcaldesa, Teresa Ladrero, el secretario provincial y el líder aragonés, Javier Lambán, que se mostró muy cómodo en su feudo, arropado por el números dos departido. De hecho, César Luena le cedió el cierre de los discursos, previo a la comida popular.

Ladrero, al igual que el resto de intervinientes, reivindicó el valor del PSOE frente al ascenso de otros partidos de izquierdas como Podemos, cuyo nombre nadie quiso pronunciar. "El PSOE es el único partido de izquierdas capaz de frenar al Gobierno tramposo de Rajoy, el partido que representa a los trabajadores, la mayoría de este país", dijo antes de ceder la palabra a Martín Llanas, quien acusó a los populares de congregarse hace una semana en Rodanas para seguir "aislados" del mundo y de inflar los datos de participación en su Día del Militante (asistieron 3.000 personas). "En la plaza no caben tantas, por lo que, o no han estado, o 2.000 fueron a almorzar y tomar cañas sin escuchar a Rudi", apostilló. 

Luena logró algo más de aplausos que sus predecesores cuando calificó la reforma electoral de maniobra del PP "para hacer trampas y caciqueos" y cuando cuestionó, en clara alusión a Podemos, a los que no quieren presentarse a las elecciones municipales para asumir alcaldías, "donde más se trabaja y menos se cobra". Unos minutos más tarde añadió: "Entre los que se fuman un puro y los que levantan barricadas hay una gran mayoría, la de las clase media trabajadora, a la que el PSOE representa".

El número dos socialista apostilló que el "verdadero" enemigo de su partido es la "desigualdad" y arremetió contra los recortes y la política económica del PP, subrayando que acabará la legislatura con 700.000 empleos menos.