Dos motoristas perdieron ayer la vida en sendos accidentes de tráfico ocurridos en la Ronda de la Hispanidad de Zaragoza y en la A-242, en el término de Fraga (Huesca). Ambos fallecidos, de 32 y 50 años, respectivamente, murieron al chocar contra sendos turismos.  

En concreto, el accidente de la capital aragonesa se produjo sobre las 13.00 en el cruce semafórico situado entre la calle de Compromiso de Caspe y la Ronda de la Hispanidad, en la Z-30. En estos momentos, la Policía Local todavía está investigando las causas del trágico suceso, aunque al parecer, en un principio, habría sido el motorista, identificado como Daniel Lanaspa Mesa, el que podría haberse saltado el semáforo en rojo y chocado de manera frontolateral con el turismo, conducido por D. J. M. S, de 37 años, que a su vez sufrió heridas leves. Según información facilitada por la Policía Local, este último llevaba puesto el cinturón de seguridad y dio negativo en la prueba de alcohol.

Para esclarecer lo sucedido y concretar las causas del siniestro, se están buscando testigos del accidente y preguntando a los conductores de los vehículos que en esos momentos circulaban por la zona. Daniel Lanaspa, que portaba casco de protección correctamente abrochado, era vecino de Las Fuentes y trabajaba en una empresa de electromecánica, cuya sede se encuentra en el barrio de San José. Con la muerte de este joven de 32 años, ya son tres las personas que han perdido la vida en accidentes de tráfico en la capital aragonesa este año. 

Por otra parte, ayer también hubo que lamentar la muerte de otro motorista en la A-242 a cuatro kilómetros del término de Fraga. El siniestro se produjo sobre las 12.30, en un choque frontolateral entre la motocicleta, conducida por Vicente del Caño, vecino de Aitona (Lérida) de 50 años, y un turismo, en el que viajaba una mujer, vecina de Lérida, que resultó ilesa. 

El accidente se produjo en el punto kilométrico 4,900 de la carretera que une Fraga y Serós (Lérida), justo enfrente de una estación de servicio. Se baraja la opción de que el accidente se produjera cuando uno de los vehículos trataba de acceder a la propia gasolinera. El fallecido, que vivía solo, había llegado hace unos 20 o 25 años como temporero a la localidad de Aitona, en la que había fijado su residencia, según explicó ayer la alcaldesa del municipio leridano, Rosa Puyol. 

En agosto del año 2007, se produjo otro accidente mortal en este mismo punto. En esa ocasión, la colisión entre dos turismos dejó una persona fallecida, dos heridas graves y una tercera leve.