15.000 autónomos tendrán que actualizar sus cuentas tributarias

La reforma fiscal les obligará a abandonar el sistema de módulos a partir de 2015.

Montoro reunido con líderes de asociaciones de autónomos.
El sistema de módulos se mantendrá para taxi, comercio y hostelería

La reforma fiscal que está preparando el Gobierno va poco a poco desvelando más matices que, de forma especial, afectarán al colectivo de los trabajadores autónomos. Junto con el anuncio de la rebaja del IRPF para los trabajadores por cuenta propia con rentas inferiores a 12.000 euros, que entrará ya en vigor a partir de julio, el Ejecutivo ha preparado una reordenación de los regímenes de tributación que afectará a buena parte de estos trabajadores. La nueva normativa obligará a partir de su puesta en marcha a que la mayoría de los trabajadores por cuenta propia de la construcción y de la industria abandonen el denominado sistema de módulos para pasar a tributar por estimación directa. Una medida que, solo en Aragón, las organizaciones de autónomos estiman que afecte a cerca de 15.000 personas.


El motivo que esgrime el departamento de Cristobal Montoro para reducir el número de sectores que se pueden acoger a este sistema, mediante el cual el propio fisco calcula lo que se debe abonar en impuestos a través de una serie de baremos, es reducir la posibilidad de fraude a través de la emisión de facturas falsas. Así, la mayor parte del colectivo de autónomos del sector de la construcción, que hasta ahora estaban adheridos al régimen de módulos (12.506 personas según el RETA) y buena parte de los dedicados a trabajos industriales (8.248) deberán amoldarse entre 2015 y 2016 al sistema de estimación directa, que se ciñe de forma más estricta a la relación de ingresos y gastos. Además, la reforma también contempla que aquellos que tengan una facturación anual superior a 150.000 euros también deban dejar de tributar por módulos.


De este trasvase se han salvado no obstante otros sectores que también habitualmente han permanecido al sistema de módulos, por conveniencia –siempre se ha considerado que es más útil para rentas limitadas- o por comodidad –requiere un menor número de trámites y formalidades-, como los taxistas, el comercio minorista y la hostelería, es decir, aquellos que trabajan directamente con el cliente. Además, por recomendación del Ministerio de Agricultura, los agricultores también podrán seguir con el sistema de módulos.


En el tintero se han quedado los autónomos del sector del transporte, que a expensas del cierre definitivo de la letra pequeña parece que podrán seguir tributando por módulos siempre y cuando sean de pequeño tamaño.


Así, las organizaciones que representan al colectivo han conseguido frenar la primera idea del comité de expertos que asesoró al Gobierno para atacar la reforma y que implicaba la supresión total del sistema de módulos. Y es que, aunque este sistema de tributación supone ventajas para Hacienda y los autónomos, como el ser una fuente estable de recursos para las arcas públicas y un sistema que facilita al autónomo la facturación, el régimen ha sido desde hace unos años objeto de un profundo debate.


Más gastos y mayor burocracia

Para los representantes del colectivo la reforma podría haber ido mejor encaminada. “El sistema de módulos siempre ha sido positivo en muchos casos ya que reduce el número de trámites y la complejidad de las normas”, explica Álvaro Bajén, secretario general de UPTA-Aragón, quien señala que “si lo que se quiere perseguir es el fraude está comprobado que los autónomos no son el principal foco de problemas”.


“Habrá mucha gente que tendrá que aumentar sus gastos al pasar a tributar de forma directa al tener que acudir a partir de ahora a gestorías que les lleven las cuentas y otros muchos que seguramente reduzcan sus cotizaciones”, explica Bajén, que estima que esta medida deberá estar acompañada de una importante publicidad para poner las cosas fáciles a los afectados.


Desde la Asociación de Profesionales Autónomos (ATA), se señala que este apartado de la reforma sí que tiene en parte su lado positivo ya que se introduce una cierta “progresividad” al excluir del sistema de módulos a aquellos que facturen más de 150.000 euros, aunque se señala que en buena parte de los colectivos a los que se ha restringido el sistema se encuentran muchos trabajadores a los que el cambio les puede perjudicar.


Hasta el 25% podría beneficiarse de la rebaja fiscal

Con una lectura más positiva han recibido los autónomos la que hasta ahora ha sido una de las medidas estrellas del Gobierno. La reducción de las retenciones fiscales en el IRPF que empezará a notarse a partir del próximo mes ayudará, según estiman, a casi una cuarta parte de todo el colectivo de autónomos que a día de hoy forman en Aragón 103.541 personas.