Rudi: "Las cosas empiezan a cambiar"

La presidenta Luisa Fernanda Rudi en las Cortes
Rudi: "Las cosas empiezan a cambiar"

La presidenta del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, ha asegurado que su Ejecutivo seguirá dando respuesta a las exigencia actuales con una defensa "sin concesiones" de los intereses de Aragón y continuará con su programa de reformas poniendo en ello "todo el sacrificio y toda la entrega".


La presidenta ha cerrado con su intervención el acto solemne de conmemoración del Día de Aragón en el Palacio de la Aljafería, en Zaragoza, celebrado de forma conjunta entre el Gobierno aragonés y el Parlamento de la Comunidad.


Rudi, consciente de que todavía son demasiados los problemas causados por la crisis que aún no han sido resueltos, como por ejemplo el paro, ha insistido en que Aragón ha logrado que las cosas "empiecen a cambiar", pero tienen que cambiar "todavía mucho más".

Economía

Para la presidenta "hay motivos para la esperanza" porque hay un cambio de rumbo acreditado que ha sido posible gracias al "importante esfuerzo" llevado a cabo por el sector empresarial aragonés pero también por el Ejecutivo, "que ha coadyuvado al proceso para la mejora económica de la región".


"Hay cambio de rumbo en la economía; no va a haber cambio de rumbo en el Gobierno de Aragón", ha recalcado su presidenta, quien ha dicho que va a mantener y "llevar hasta el final" sus dos compromisos clave: hacer sostenible el presupuesto sin aumentar, e incluso reduciendo, la presión fiscal, y lograr este objetivo al mismo tiempo que se respeta el "blindaje social de carácter transversal" que protege la sanidad, la educación y la cohesión.


Fuera del realismo "no hay política seria", ha dicho Rudi, quien se ha mostrado tajante al asegurar que su Gobierno no va a prestarse a este juego porque en el Ejecutivo están convencidos de que "no hay alternativa realista" al proceso de saneamiento y de consolidación fiscal.


Y en este punto se ha referido a las recientes decisiones del nuevo primer ministro francés, Manuel Valls, que ha congelado pensiones y salarios públicos, para decir que hay ajustes que "inevitablemente tienen que producirse" porque hay "desajustes que bloquean nuestra capacidad de crecimiento".


Ha apuntado que de una crisis como ésta sólo se sale con un ajuste presupuestario y la coalición de gobierno PP-PAR va a continuar las reformas necesarias para lograr mantener la calidad de los servicios públicos y controlar el gasto.


Pero eso no significa, para Rudi, que el Gobierno esté dispuesto a asumir esfuerzos "de más" que no corresponden a Aragón, ni que se vaya a aceptar "resignadamente" cualquier cosa "que se pretenda decir" sobre las cuentas públicas de la Comunidad.

Exceso de déficit público

Rudi se ha referido al exceso del déficit público registrado en las cuentas de Aragón de 2013 respeto al objetivo fijado por el Estado, y ha reconocido que existe "una discrepancia de fondo" entre ambas administraciones, la aragonesa y la estatal, en cuanto al cálculo de este exceso.


El Gobierno de Aragón "no va a recibir lecciones de compromiso con la disciplina y el control del gasto", ha advertido.


La presidenta se ha comprometido a corregir la desviación "real", que es "mínima y coyuntural, actuando sobre sus causas "auténticas", y ha manifestado que el ajuste no se hará al precio de "suprimir el compromiso social de las reformas".


En definitiva, ha recalcado que va a seguir cumpliendo sus compromisos de "gobernar bien pero con austeridad", de "preservar la cohesión social y de asegurar la calidad de la sanidad y la educación".


Y va a defender el "peso político" de Aragón en España, y en este sentido se ha referido a la revisión del sistema de financiación, para evitar que perjudique a Aragón, y a su rechazo al trasvase del Ebro ante quienes lo intenten promover.


"Con la misma rotundidad" rechazará cualquier proyecto de reforma constitucional en sentido federal y asimétrico "que pudiera convertir a los aragoneses en españoles de segunda" y que, llegado el caso, "consumaría el sometimiento de la gran mayoría de los españoles a la voluntad e intereses de una elite política ajena a lo que a los aragoneses nos conviene".