El ministro vuelve a defender las "interconexiones" de ríos

Cañete asegura que el nuevo plan hidrológico nacional que se impulse se acordará "en el Consejo Nacional del Agua, con los presidentes autonómicos y por unanimidad".

El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, fijó ayer su plan de actuación hasta llegar "a un nuevo plan hidrológico nacional, diferente al anterior", que además pospone al menos hasta 2014 cualquier decisión sobre posibles trasvases. "Primero haremos los planes de cuenca, para ver los caudales disponibles y en función de estos establecer los usos presentes y futuros dentro de la cuenca", explicó Arias Cañete durante una entrevista.


El ministro indicó que, tras conocer los planes de cuenca de cada río, "estudiaremos si hay posibilidades o no de interconexiones de cuenca y, si las hay, las pondremos encima de la mesa". Arias Cañete negó que haya hablado en algún momento específicamente del Ebro al barajar posibles futuros trasvases. "Cuando planteo la posibilidad de interconexiones no hablo de ningún río en concreto", insistió, y aseguró que el nuevo plan hidrológico nacional que se impulse se acordará "en el Consejo Nacional del Agua, con los presidentes autonómicos y por unanimidad", aseveró.


Ante las dudas de que en el tema del agua se vaya a tomar una decisión en España por unanimidad, Arias Cañete indicó que "cuando las cosas se ponen encima de la mesa con racionalidad, se pueden conseguir acuerdos; lo primero que quiero es que me digan científicamente cuánta agua se necesita y cuánta agua tienen los ríos". Dicho esto, dejó claro que considera que "si en una comunidad sobra agua", le cuesta creer que esa autonomía diga que "no va a poder ayudar".


Además de estas declaraciones, el futuro PHN fue protagonista de una moción en la comisión de Medio Ambiente del Congreso de los Diputados. En una iniciativa de IU, esta formación y el PSOE pactaron una enmienda en la que se pedía garantizar los altos caudales ecológicos que exige Cataluña para el Delta del Ebro y en la que se vetaba cualquier posible trasvase de ese río. El texto fue rechazado con el voto en contra del PP.